Construmat arranca con el clamor del sector para que los recortes no afecten a la construcción

Con el Salón del Automóvil todavía en marcha, Barcelona asiste hoy a la inauguración de Construmat, el certamen bianual dedicado a los materiales y herramientas de la construcción. La feria arranca en el recinto ferial de la Gran Via con el ruido de fondo del propio sector, que en una iniciativa insólita, a través del Manifiesto Constumat ha pedido a las administraciones que los recortes presupuestarios no afecten al sector. El presidente de Construmat y de Comsa-Emte, Josep Miarnau, ha hecho alusión al manifiesto, aunque sin eludir una autocrítica: "Desde el sector se hubiera podido planificar mejor, pero no es el único responsable de la situación actual. Necesita un plan de apoyo para que el sector vuelva a funcionar y para que el país funcione". Curiosamente, también un centenar de trabajadores de los sindicatos CC OO y UGT se han manifestado en el exterior pidiendo una mayor inversión pública para el sector.

En sus discursos durante el acto de inauguración, las autoridades se han esforzado en aplaudir el trabajo de las empresas en momentos de crisis, les han animado a centrarse en la rehabilitación y en la internacionalización y han anunciado nuevas normas que pueden revitalizar al sector mientras no amaina el temporal. La secretaria de Estado de Vivienda, Beatriz Corredor, ha anunciado que la Ley de Sostenibilidad en el Medio Urbano incluirá una ITV para edificios, de la que se viene hablando desde hace años sin mucha concreción. Será la Inspección Técnica de Edificios (ITE) y la deberán pasar todos los edificios de más de 40 años y con una periodicidad de cada quince. Corredor ha recordado que la mitad del parque de viviendas español tiene más de 30 años y ha explicado que la ITE también incluirá un informe de eficiencia energética. En Cataluña, desde el pasado mes de febrero deben pasar la ITV los edificios de más de 45 años.

Desde el ayuntamiento de Barcelona, el teniente de alcalde Ramon García-Bragado ha explicado también que el consistorio estudia "asumir las cargas en las fases de urbanización de proyectos que están parados por culpa de la crisis a cambio de techo edificable". Sería una opción para desencallar proyectos como los de Can Batlló o La Marina, aunque todavía están por pactar las compensaciones de unos y otros.

El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha animado a los empresarios de la construcción a salir al extranjero donde, ha dicho, "hay países que no tienen crisis ninguna". Mas también ha recordado que su ejecutivo prepara una "macro ley" para reducir la burocracia en todos los sectores.

Construmat permanecerá abierto hasta el próximo sábado, con la novedad de que el úlitmo día se abrirá al gran público. El salón cuenta con 1.318 empresas de 28 países, cifras muy parecidas a las de 2009, aunque la superficie expositiva es menor. Mañana, el salón asistirá a la firma del convenio con un grupo de autoridades chinas por el que Construmat se celebrará en 2012 en Pekín.