Opel y los trabajadores desbloquean el proceso de reestructuración

La dirección de Opel y los representantes de los trabajadores en sus plantas de toda Europa han llegado a un principio de acuerdo sobre la reestructuración de la filial europea de General Motors, bloqueada desde hace meses, que abre el camino para que la compañía reciba los créditos y ayudas comprometidas por los países que cuentan con alguna de sus fábricas. Según ha comunicado Opel, los sindicatos han dado su visto bueno a un ahorro de costes de 265 millones de euros al año en salarios y en la partida de personal. Para ello, la plantilla ha aceptado congelar sus salarios hasta 2012, aunque de momento solo en Alemania.

El plan contempla el fortalecimiento del centro técnico de Ruesselsheim, en Alemania, así como el desarrollo y lanzamiento de nuevos productos, entre ellos un coche pequeño, que se situaría por debajo del Corsa y al que podría optar la planta zaragozana de Figueruelas.

Este plan de producto se enmarca en el programa de inversiones por importe de 11.000 millones de euros que avanzó la empresa el pasado mes de febrero, cuando presentó su reestructuración, que contempla la supresión de 8.300 empleos, 900 de ellos en Figueruelas.

El consejero delegado de Opel, Nick Reilly, ha recordado en una rueda de prensa en la sede de Opel en Rüsselsheim (cerca de Fráncfort) que la dirección y el comité de empresa habían acordado que los trabajadores renuncien en Alemania a parte de las pagas extras de verano y Navidad en 2010 y 2011.

No obstante, esta aportación de los trabajadores de Opel a la financiación depende de que Opel reciba los avales estatales que ha solicitado a los países donde tiene fábricas. GM prevé avales estatales en Europa por valor de 1.800 millones de euros, de ellos unos 1.000 millones de euros de Alemania. Además, también está vinculado al desarrollo y la introducción en el mercado de nuevos productos, como un nuevo vehículo pequeño por debajo del Corsa.

En caso de que Opel no produzca los vehículos y productos que prevé el acuerdo anunciado hoy, los ahorros, que están asegurados a través de una cuenta fiduciaria, volverán a los trabajadores.