El Gobierno ruso "dará apoyo político" a Lukoil para entrar en el accionariado de Repsol

El ministro de Energía ruso, Sergei Shmatko, ha afirmado hoy que su Gobierno está dispuesto a dar apoyo político a Lukoil en el caso de que consiga un acuerdo para obtener una parte del accionariado de Repsol YPF, según informa la agencia Interfax. "Si lukoil muestra interés por este proyecto se le dará el apoyo político correspondiente", ha asegurado.

En un acto con la presidente argentina, Cristina Fernández de Kirchner, durante una visita oficial a Rusia, Shmatko ha recordado sobre las negociaciones de cara a una eventual entrada de la petrolera privada rusa en la compañía hispano-argentina que "actualmente están discutiendo los problemas financieros y las posibilidades de crédito". No obstante, ha asegurado que los problemas que están surgiendo en torno a la operación no se han tratado en la cumbre bilateral. Además, ha explicado que el Kremlim está interesado en que Lukoil esté presente en el merado energético europeo" a través de participaciones en compañías estratégicas.

Las declaraciones de hoy de Shmatko han tenido lugar apenas dos días después de la visita del ministro de Exteriores español, Miguel Ángel Moratinos, al país en la que conversó con el presidente Dmitri Medvédev "de la voluntad de ambos países de desarrollar una relación en materia energética en los dos sentidos, las empresas españolas en Rusia y las rusas en España".

Atasco en las negociaciones

Lukoil está manteniendo conversaciones para entrar en el capital de Repsol YPF con la compra del paquete de la constructora Sacyr Vallehermoso, que cuenta con el 20% de las acciones. La adquisición del paquete de Sacyr está condicionada al acuerdo al que Lukoil llegue con los bancos que dirigen el crédito solicitado por la constructora. Lukoil baraja también la posibilidad de comprar paquetes de otros accionistas, como La Caixa, aunque las negociaciones se encuentran en punto muerto desde la pasada semana.

Desde la empresa, un portavoz de la petrolera rusa ha indicado a Europa Press que "es habitual que Lukoil busque el respaldo del Gobierno ruso a la hora de iniciar cualquier proyecto internacional", aunque ha precisado que este apoyo "depende de cada país". No obstante, ha declinado realizar cualquier comentario sobre el posible interés en adquirir una participación en Repsol.

Por otro lado, Lukoil ha indicado que en el día de ayer el vicepresidente de la compañía, Vladimir Nekrasov, firmó un memorandum de entendimiento con las compañías argentinas Enarsa y Pobater para el suministro de combustible diesel y otros productos petroleros. El acuerdo, que tendrá una duración inicial de tres años, supone "el primer paso en la cooperación entre Lukoil y Argentina", donde Repsol YPF es la principal compañía del sector, y "podría ampliarse en el futuro", ha apuntado la compañía rusa. En este sentido, Nekrasov apuntó que Lukoil ya está presente en Latinoamérica a través de diversas actividades en Colombia.

Cepsa arremete contra Sacyr

Mientras tanto, desde España, el presidente de Cepsa, Santiago Bergareche, ha dicho hoy que Sacyr es "el problema" en la posible entrada de Lukoil en su competidora Repsol YPF, porque "las grandes empresas deben dedicarse a lo suyo y no entrar en posiciones importantes donde no tienen la gestión de los activos". Además, ha defendido la posible entrada de la compañía rusa en Repsol YPF, "que no debería escandalizar" porque es una consecuencia del libre mercado.

Lukoil es la mayor petrolera privada de Rusia y la segunda del mundo en cuanto a las reservas comprobadas de crudo y gas, tras la estadounidense ExxonMobil. Concretamente, extrae un 2,3% del petróleo mundial principalmente en Siberia occidental, y también en Kazajistán, Egipto, Azerbaiyán, Arabia Saudí, Venezuela, Colombia, Irak y Uzbekistán, entre otros países.

En este orden de cosas, la agencia de calificación Standard & Poor's ha reducido la perspectiva de crédito de Lukoil a "estable" desde "positiva" y ha confirmado el rating de crédito a largo plazo de la compañía en 'BBB-'. "Aunque esperamos que los resultados del tercer trimestre sean razonablemente favorables, en el cuarto trimestre y a principios de 2009 Lukoil se enfrentará a significativas presiones en su beneficio y flujo de caja", señala la agencia en alusión al previsible abaratamiento del petróleo y el el deterioro de las condiciones del sector petrolero ruso.