Un comité interministerial estudiará las acusaciones al gobernador del Banco de Italia

El ministro de Trabajo italiano, Roberto Maroni, ha anunciado hoy la creación de un comité interministerial para el crédito y el ahorro (CICR) que estudiará las acusaciones vertidas contra el gobernador del Banco de Italia, Antonio Fazio, por sus presuntas ayudas al Banco Popolare Italiano (BPI) para lanzar una OPA sobre Antonveneta.

Esta decisión ha sido tomada hoy durante un Consejo de Ministros especial, en el que se ha presentado un informe del ministro de Economía, Domenico Siniscalco, sobre los últimos escándalos que salpican a Fazio. En el Consejo de Ministros estaba previsto el estudio de la posibilidad de elaborar algún proyecto de ley para introducir un límite en el mandato del gobernador del banco central, de carácter vitalicio en la actualidad.

Sin embargo, tras la reunión del Gobierno, Maroni ha explicado que no se ha hablado de introducir un límite al mandato del gobernador, ya que "el Gobierno no tiene competencias para realizarlo", y que tampoco se han presentado "actos de acusación" a Fazio. Por su parte, el ministro de Cultura, Rocco Buttiglione, ha explicado que "no se descarta" que se puedan introducir algunas enmiendas sobre este tema en el diseño de ley sobre el Ahorro.

En este sentido, el Ejecutivo italiano ha expresado su respaldo al gobernador del Banco de Italia aunque ha constatado el temor a que se resienta la imagen del sistema bancario en Europa.

Mientras tanto, la oposición sigue pidiendo a Fazio que dimita de su cargo, después del escándalo de las escuchas telefónicas en las que se revelan acuerdos entre el gobernador y el presidente de la Banca Popolare Italiana (BPI), Giampiero Fiorani, para favorecer al grupo italiano en la pugna con el grupo holandés ABN Amro para hacerse con Banca Antonveneta.

A las conversaciones telefónicas, publicadas en algunos medios de comunicación, se suman hoy nuevas escuchas de las que informan los diarios 'Corriere della Sera' y 'La Repubblica', en las que la mujer de Fazio, Cristina Rosati, invita a Fiorani a no preocuparse por que aún no hubiera llegado la autorización del Banco de Italia a la OPA del BPI por Antonveneta, y en las que le pide que mantenga silencio sobre todo este tema.

En estas conversaciones, Fiorani se queja ante Fazio de que el órgano de control de los mercados (Consob) le está poniendo dificultades, tras lo que el gobernador le comenta que, precisamente por este motivo, "no hay que equivocarse en nada" a la hora de actuar.

Fazio ha negado favoritismo hacia la entidad de Fiorani en su batalla financiera contra Abn Amro, pero es bien conocida su defensa de los bancos italianos frente al intento de compra de los extranjeros, como ha ocurrido también en el caso del español BBVA y su fallida oferta pública para controlar BNL.