La Comisión propone fuertes recortes a la pesca de merluza, rape y cigala

La Comisión Europea ha propuesto hoy fuertes recortes en la pesca de merluza, rape y cigala, de importancia para la flota española, dentro de su propuesta de cuotas pesqueras para 2004. La propuesta sobre Totales Admisibles de Capturas (TAC) incluye una reducción del 48% de los cupos de merluza, del 61% de los de rape y del 70% de los de cigala en aguas de la Península Ibérica. El ministro español de Agricultura, Miguel Arias Cañete, ha expresado su rechazo a la propuesta de reducción, especialmente en el caso de la merluza del norte, por considerarla exagerada.

Estas especies, a juicio de la Comisión Europea, figuran entre las que se encuentran en peor situación e incluso los científicos habían recomendado que se suprimiera su pesca, según la propuesta. El Ejecutivo comunitario ha propuesto además una reducción del 66% de la pesca de la anchoa en aguas del Golfo de Vizcaya y ha planteado disminuir un 6% la cuota de merluza en aguas del mar del Norte. Por último, Bruselas plantea limitaciones directas del esfuerzo pesquero (días en los que se puede salir a faenar) y ha fijado estos días con el fin de asegurar que no se rebasan las cuotas en el caso de la merluza y el bacalao.

Aunque se trata tan sólo de una propuesta, que debe ser aprobada por los Quince en el próximo Consejo de Pesca a partir del próximo día 16, el ministro Arias Cañete ha mostrado su desacuerdo inmediatamente, especialmente con el recorte del 6% en el cupo de merluza en aguas del norte porque considera que los recursos están en mejor situación y se puede conseguir una cuota más favorable. Respecto a la merluza en aguas del sur (mar cantábrico, Portugal y Galicia), el titular de Agricultura y Pesca ha reconocido que la situación es más crítica, pero ha rechazado el recorte del 50% que pretende Bruselas. Arias Cañete también se ha mostrado en desacuerdo con los recortes de anchoa, rape y cigala en aguas ibéricas.

Tres tipos de medidas

Sin embargo, la CE ha explicado que su propuesta pretende "reforzar la protección de las reservas pesqueras, a fin de evitar el cierre de determinadas pesquerías en 2004". Para lograrlo, sugiere tres tipos de decisiones: primero, consolidar las medidas existentes para ciertas reservas de bacalao; segundo, extender dichas medidas a otras reservas amenazadas; y tercero, reducir sustancialmente las posibilidades de pesca para las nuevas reservas que se han identificado como amenazadas.

En espera de que se apliquen los planes de reconstitución a largo plazo, "conviene aplicar medidas a corto plazo más estrictas que incluyan unos TAC muy reducidos, restricciones directas de la actividad de pesca y medidas de control tendentes a garantizar el respeto de las cuotas", continúa la nota.

"Las consecuencias de la aplicación insuficiente de las medidas de conservación y de reconstitución saltan a la vista", ha declarado el comisario responsable de la política pesquera común, Franz Fischler. "La situación de las principales reservas demersales (de fondo) sigue siendo precaria y el conjunto del sector paga el precio por ello". "La alternativa es simple", argumenta el comisario, "o bien los TAC son reducidos radicalmente y el esfuerzo de pesca limitado anualmente, o bien ponemos en marcha planes de reconstitución a largo plazo que nos permitan medidas menos rigurosas y más coherentes". "Yo soy favorable a la segunda opción", concluye Fischler.