El Senado de EE UU aprueba un proyecto para combatir el fraude empresarial
El texto establece junta independiente para controlar a las empresas auditoras e impone diez años de prisión y multas de entre 500.000 y un millón de dólares para quienes cometen fraude
Los legisladores estadounidenses parecen decididos a evitar que se repitan los últimos escándalos financieros en el país. El Senado de EE UU ha aprobado por unanimidad un proyecto de ley que castiga a los ejecutivos que cometen fraude contable y reforma el sector empresarial.
Horas después de que el presidente, George W. Bush, exigiera un mejor comportamiento ético del sector empresarial, el Senado aprobó, por 97 votos a favor y ninguno en contra, la medida bipartidista del senador demócrata Paul Sarbanes, que establece una junta independiente para controlar a las empresas auditoras.
El proyecto de ley, que debe ser armonizado con la versión más flexible que aprobó la Cámara de Representantes en abril pasado, impone diez años de prisión y multas de entre 500.000 y un millón de dólares para quienes cometen fraude. También exige a las empresas que presenten informes financieros fiables, como parte de un esfuerzo por restaurar la confianza de los inversores en los mercados.
Restricciones a las auditorías
La medida, aprobada tras seis días de debate, restringe además el tipo y cantidad de tareas de consultoría que pueden realizar las empresas auditoras con sus clientes, como fue el caso de la auditora Arthur Andersen con el gigante energético Enron.
Como parte del proyecto de reforma, el Senado incluyó una enmienda que prohibe que los ejecutivos soliciten y obtengan préstamos de sus empresas, para evitar un posible conflicto de intereses.
Con este proyecto de ley, el Senado quiere enviar un mensaje de dureza contra la corrupción y fraude en el sector empresarial, ante la serie de irregularidades contables registradas en empresas como WorldCom, Xerox, y Global Crossing. En EE UU se vive un ambiente de desconfianza pública hacia las grandes empresas y los mercados financieros que se vio ayer reflejada nuevamente en las bolsas de valores de EE UU y Europa.