La compañía aérea Sabena prevé un recorte de 2.000 empleos

El plan, del que informan hoy dos diarios belgas, prevé además la venta de activos, como los hoteles gestionados por la línea aérea, algunos aviones y las filiales de transporte de carga y de restauración en vuelo, y la supresión de destinos intercontinentales como Washington y Tokio.

Los diarios Le Soir y De Morgen adelantan el contenido del plan, que deberá aún ser sometido a la negociación con los representantes de los trabajadores a partir de la semana próxima.

Aunque ese plan prevé que parte de los empleos suprimidos, en un plazo de cuatro años, lo sean en forma de bajas voluntarias (Sabena tiene unos 11.000 empleados), algunos de los puestos de trabajo serán simplemente "eliminados", según la expresión de Le Soir.

El plan diseñado por el máximo responsable de la compañía, Christoph Mueller, prevé además el uso de aviones más pequeños (el diario asegura que se están considerando modelos de Embraer y Bombardier) y la supresión de hasta seis destinos de Sabena en Europa.

La legislación belga prevé que los trabajadores deberán ser informados del contenido del plan, lo que está previsto suceda el próximo jueves, en un consejo de empresa extraordinario.

Los detalles del plan se conocen tres semanas después de que el grupo aeronáutico Swissair y el Gobierno belga, accionistas de Sabena, alcanzaran un acuerdo sobre el plan de apoyo financiero a la compañía aérea belga, que incluye una inyección de capital de 430 millones de euros.

El acuerdo libera al grupo suizo de su compromiso de aumentar la participación en Sabena hasta el 85%, frente al 49,5% actual, y prevé la inversión de 430 millones de euros en el plazo de dos años.

Tanto el Gobierno belga como Sabena decidieron posteriormente retirar sus denuncias contra Swissair, a la que acusaban de no haber cumplido con sus compromisos en relación con la compañía aérea, en la que el Estado belga tiene el restante 51,5 por ciento.

Los pilotos de Sabena se reunieron anoche para adoptar una postura común ante los cambios previstos por este plan de

reestructuración. El denominador común de todos ellos es su "clara" oposición a cualquier tipo de medida que oblige a realizar despidos dentro de su colectivo, según la información de Le Soir.

Lufthansa reduce vuelos

La aerolínea alemana Lufthansa va a reducir su oferta de vuelos a partir del invierno a causa del "retroceso de la economía mundial", según un comunicado de la compañía. La aerolínea va a reducir su capacidad de crecimiento y se va a centrar en "las rutas más rentables adaptando sus operaciones de largo recorrido para contrarrestar el retroceso de la economía mundial y su impacto en el tráfico aéreo intercontinental", indicaron dichas fuentes.

A principios del invierno 2001/2002, Lufthansa dejará de operar sus servicios a Río de Janeiro y las rutas a Bogotá y Tashkent se interrumpirán a principios de 2002.

Simultáneamente, la aerolínea alemana utilizará aeronaves más pequeñas en las rutas de Frankfurt a Atlanta, Detroit y Vancouver y eliminará dos vuelos emanales de la ruta Frankfurt-Nueva York.

Por otro lado, la compañía aérea KLM reducirá a partir del próximo invierno su capacidad de transporte en un 3%, lo que conllevará la supresión de un cierto número de empleos, no precisado, según informó la aerolínea holandesa.

KLM reacciona así al estancamiento o disminución en la demanda de algunas de sus líneas, como son Dubai, Almati (Kazajistán), Damasco-Amán, Nueva York, Sapporo-Nagoya, Teherán y Tel Aviv.