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La Federación de vecinos cree que Bilbao "va a dos velocidades"

Critica el abandono de los barrios frente al apogeo del centro

La Federación de Asociaciones Vecinales de Bilbao denunció ayer que la ciudad va a "dos velocidades". En una rueda de prensa en el Centro Cívico de la Bolsa, Francisco Javier Muñoz, presidente de la agrupación, resaltó que el centro de la villa "ha mejorado y no le falta casi de nada". "Es visitable y presentable", indicó. Sin embargo, agregó a continuación, los barrios, en los que reside el 80% de la población, "dejan mucho que desear en cuanto a zonas verdes, centros escolares, sanidad, cultura, ocio...". El anhelo de la Federación es aprovechar la revisión del Plan General de Ordenación Urbana, en la que participará "activamente", para acabar con estos desequilibrios y "hacer una ciudad más humana".

La agrupación aboga por implantar el Billete Único en transporte

Entre las prioridades de los representantes vecinales se encuentra poner fin a la "especulación del suelo". "Existen 17.000 casas vacías en la ciudad, el problema es que su precio es muy elevado. Apostamos por casas sociales en alquiler y por la rehabilitación", dijo Muñoz, quien lamentó que "el esfuerzo constructivo" no haya servido para facilitar el acceso a la vivienda a los más jóvenes.

La Federación, formada por un total de 22 asociaciones de vecinos, también defiende la sustitución de la tarjeta de plástico Barik por el Billete Único con un solo precio por recorrido al margen del número de medios de transporte utilizados. Asimismo, aboga por un mapa escolar "digno y viable" que cubra todas las necesidades con la construcción de nuevos centros. "También hay que prestar atención a los colegios que sufren marginación, muchos en Bilbao", manifestó Muñoz.

Incrementar los espacios verdes y mejorar los servicios sociales -"que no haya miseria humana por las calles", apuntó el presidente de la Federación- también son objetivos prioritarios de los vecinos, al igual que el fomento de los mercados locales. "Apoyamos al pequeño comercio, porque donde hay tiendas hay vida social", aseveró Muñoz.

En este punto, el representante vecinal sacó a colación el conflicto entre los sindicatos y los establecimientos que, amparados por la ley, decidieron abrir sus puertas el domingo pasado y el del 18 de diciembre. "Apoyamos a los sindicatos. Es justo que se manifiesten", destacó Muñoz. Estar del lado de las centrales implica ir contra el alcalde, Iñaki Azkuna, a favor de la apertura y el cumplimiento de la legalidad. "Debería darle vergüenza insultar a los trabajadores y llamarles matones. No hay derecho", concluyó Muñoz.

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