Los sindicatos de Metro acusan a Prego de ser "el responsable" del conflicto

Los miembros del comité de huelga de Metro -ELA, LAB, CIM, UGT, LAB y ESK- culparon ayer a Iñaki Prego, consejero delegado del suburbano, del estancamiento del conflicto y reclamaron su dimisión. En un acto en el muelle del Arenal, coincidiendo con el primer día de paro parcial del año, los representantes de los trabajadores acusaron a Prego de ser "el verdadero responsable" de los problemas y de haber instigado "a la clase política, institucional y a la ciudadanía" contra los empleados del servicio público. Asimismo, le responsabilizaron de haber ocultado información.

Por todo ello, exigieron su salida de la empresa y la llegada de "aire fresco". "Necesitamos personas que sepan respetar los acuerdos y que sen capaces de tratar a sus empleados con el suficiente respeto", pidieron. En este punto, lanzaron un llamamiento a los políticos que auparon a Prego para que, en el caso de que éste no presente su renuncia, "tengan la suficiente altura de miras para proceder a su cese fulminante".

Los servicios mínimos fueron del 60% en la primera huelga del año

En opinión de los representantes sindicales, el conflicto ha "empeorado" con el nuevo año por la decisión del Consejo de Administración de congelar, con carácter retroactivo, los salarios de 2011, lo que implicará que cada trabajador deberá devolver de media unos 1.500 euros. Los sindicatos impugnarán "de forma unitaria" ante los tribunales la decisión al considerarla "injusta, fuera de lugar y posiblemente ilegal". El próximo jueves está convocado otro paro de tres horas. Asimismo, el comité de empresa propondrá a los trabajadores en asamblea si son partidarios de celebrar "una gran manifestación" el próximo día 19.

Con respecto a la primera jornada de huelga del año, en víspera de Reyes, Metro aseguró que durante las tres horas que duró, de 9:45 a 12:45 horas, se habían ofrecido unos servicios mínimos del 60%, el doble de lo establecido por el Gobierno vasco.

Según la empresa, nueve de cada diez personas que viajan en el suburbano en un día laborable normal lo hicieron también ayer. En total, 71 trabajadores apoyaron el paro, mientras que, recordó la dirección, la huelga del pasado 13 de diciembre, en la misma franja horaria, fue secundada por 114 empleados. El servicio recuperó la normalidad a las 13:15 horas, aseguraron. Por su parte, los sindicatos cifraron la incidencia del paro en un 85%.

A pie de andén, el paro no se notó demasiado. Un dato: entre las 11:10 y las 11:30 horas pasaron tres trenes por la estación de San Mamés en dirección a Bilbao. En esta parada, Pedro mira cada poco tiempo el indicador electrónico que registra los minutos que restan para que llegue el convoy. Parece preocupado. "Es una salvajada lo que están haciendo. Son como los controladores aéreos. Al final, el que lo sufre es el ciudadano. No hay derecho", dice.

Iñaki pierde el metro por segundos, pero no le preocupa demasiado. "Parece que están viniendo bastantes trenes", apunta. "Creo que tienen razón los sindicatos", responde a la pregunta del periodista. Y a continuación, argumenta esa opinión: "La empresa no ha cumplido los acuerdos a los que llegó en verano". Conoce de buena fuente el conflicto, ya que, confiesa, tiene "conocidos" entre los representantes de los trabajadores. De todos modos, considera que no estuvo bien la huelga de 24 horas en Santo Tomás, la mayor en más de tres lustros de historia del suburbano. "No me gustó nada y se lo dije", asegura.

Ana va cargada de bolsas. Ha estado de compras y regresa a casa. No sabe nada del paro convocado en el día, aunque sí está al tanto de un problema "que está durando demasiado". "No me parece bien lo que están haciendo los trabajadores. Que protesten si lo creen conveniente, pero que no nos hagan pagar el pato a los de siempre. Es una faena", critica.

Ibai es de Vitoria y estudia en Bilbao. Prepara unas oposiciones para ser funcionario, "la mejor salida". No está enterado del problema entre la dirección y la plantilla, pero no cree justo que use a los usuarios como "rehenes".