_
_
_
_

El escolta de Camps afirma haberle prestado 200 euros para una chaqueta

La acusación anuncia que denunciará a dos testigos por falso testimonio

El escolta que Francisco Camps tuvo durante los ocho años que permaneció al frente de la Generalitat declaró ayer en el juicio de los trajes que un día, en el verano de 2008, prestó dinero al expresidente para realizar una compra en Forever Young, uno de los establecimientos de los que presuntamente salieron las prendas con las que le obsequiaba la trama Gürtel. "Al poco de haber entrado en la tienda, volvió a salir, se acercó a mí, me preguntó si podía dejarle dinero y le dije que sí. Creo que fueron sobre 200 euros", afirmó el guardaespaldas.

Su versión fue confirmada por el chófer de Camps. Los dos relataron que a continuación guardaron en el maletero la bolsa "portatrajes" con las que el expresidente salió de Forever Young, aunque no supieron decir qué contenía. El escolta añadió que alguna otra vez el expresidente le había pedido dinero, aunque nunca tanto ("para un libro", dijo). Y que cuando eso ocurría, al volver a Valencia "subía a casa, cogía el dinero y me lo bajaba".

El guardaespaldas asegura que el expresidente solía pedirle dinero
Más información
Miradas de silencio
El juez vuelve a reprender a Camps por hacer gestos

Nadie lo manifestó durante la sesión de ayer y por tanto el jurado no pudo saberlo, pero la comparecencia del escolta y del chófer fue rechazada repetidamente por el juez instructor del caso, José Flors, y aceptada en última instancia por la Sala Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia valenciano. Flors se oponía a las dos declaraciones porque la americana "bléiser azul marino" rebajada que Camps asegura que compró aquel día no está entre las 25 prendas de vestir que supuestamente le regaló la trama corrupta. Es decir, que "nadie pone en duda", en palabras del juez instructor, que la pagase.

Los dos testigos admitieron a preguntas de la fiscalía haberse reunido con Javier Boix, letrado de Camps, para repasar lo ocurrido ese día. El escolta reconoció que lo hizo en dos ocasiones, la última la pasada semana.

Ayer, una vez finalizados los interrogatorios a cerca de 80 testigos y antes de iniciar la toma de declaración a los peritos, que comienza hoy, el presidente del tribunal del jurado, Juan Climent, resolvió la petición de la defensa de Camps de celebrar un careo entre el informático de la tienda Forever Young, Francisco Ferre, y la contable del mismo establecimiento, Raquel Vázquez. El magistrado la rechazó.

Las acusaciones se habían opuesto al careo, entre otras cosas, tal como adelantó el abogado de la acusación particular, porque van a instar la apertura de un procedimiento tanto contra la contable como contra el propietario de la tienda, Eduardo Hinojosa, por falso testimonio y falsedad documental.

El informático declaró haber recibido instrucciones de la contable para alterar las bases de datos de la tienda y ocultar el nombre de Camps de algunos documentos de encargo. Ferre admitió que llegó a cambiar el número de cliente en la base de datos, pero explicó que era imposible variarlo en los tiques, en los que únicamente se podía suprimir, y que así lo hizo. Vázquez negó haber mandado los correos electrónicos en los que aparecían las órdenes y sostuvo que un "hacker" había entrado en su ordenador y enviado los mensajes.

Hinojosa presentó como originales, a requerimiento del juez, esos tiques de encargo, en los que faltaba la banda superior, donde aparece el cliente. Sin embargo, el sastre, José Tomás, llegó al juicio y, en un golpe de efecto, aseguró que eran falsos y que él tenía los originales, extraídos de la causa general de Gürtel, pese a que nunca llegaron al Tribunal Superior de Justicia de Valencia.

Los documentos se admitieron y, por ello, la acusación quiere que se investigue a Hinojosa y a Vázquez para averiguar si falsificaron esos documentos y, con ello, mintieron al negar haber dado instrucciones para tratar de borrar el rastro del supuesto delito de Camps.

Francisco Camps desciende ayer del coche ante el juzgado.
Francisco Camps desciende ayer del coche ante el juzgado.JOSÉ JORDÁN

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_