Metro Bilbao plantea unos servicios mínimos que desactivan la protesta
La empresa pretende que el 100% de los trenes circulen en las horas punta
La tensa reunión mantenida ayer durante algo más de dos horas entre representantes de los sindicatos y la dirección del metro, a instancias del Gobierno vasco, no arrojó ni un poco de luz sobre un conflicto que ha quedado estancado a cinco días del paro de 24 horas fijado para la festividad de Santo Tomás, la jornada en que más viajeros transporta el suburbano en todo el año. Lo que sí quedó claro es que la empresa está decidida a anular prácticamente la protesta al reclamar a Empleo unos servicios mínimos del 90% que alcanzan el 100% en los momentos clave de la jornada, como es el mediodía y la hora previa y posterior al partido de Copa del Rey que el Athletic disputa a las 22.00 ante el Oviedo. El comité, por contra, ha exigido que esos servicios se reduzcan en general al 30%.
El comité deploran las "desafortunadas" delaraciones del 'lehendakari'
Los sindicatos quieren un acto de conciliación y la dirección, un árbitro
En cualquier caso, los sindicatos aseguraron que los trabajadores acatarán el dictamen final de Empleo, independientemente de cual sea. "A lo largo de las 13 huelgas realizadas este año siempre se han cumplido de manera precisa", recordó ayer el presidente del comité, Rafael Valencia, de ELA. "Independientemente de que fueran abusivos y luego los hayamos denunciado", señaló.
Como en el anterior encuentro, la dirección reclamó ayer el arbitraje para desbloquear la situación y el comité se inclinó por un acto de conciliación "para mantener una relación dialogada". De momento no hay ninguna otra fecha señalada para celebrar un nuevo encuentro. El día 20 están programadas las asambleas en las que la plantilla del metro tomarán las decisiones pertinentes acerca de la huelga de Santo Tomás.
Pese que el conflicto ha subido varios grados de tensión política en los últimos días y los sindicatos alertan de que su paciencia "no es infinita", Valencia reiteró que tiene la "mano tendida" para "establecer cauces de conciliación que puedan abrir la senda de la negociación". "No queremos dirigir la empresa, solo que se cumplan los acuerdos y el convenio colectivo", apuntó Valencia.
La intervención pública del lehendakari, Patxi López, sobre los paros contribuyó a recrudecer el intercambio de reproches de tinte político en esta problemática. López avisó de que "es hora de poner a cada uno en su sitio" y los sindicatos le instaron a informarse "en profundidad" del conflicto. "De sus declaraciones se desprende que su objetivo último no es solucionar los problemas, sino posicionarse con la parte que más le interesa, la patronal", denunció Valencia, quien subrayó que los gestores del metro "son personas de confianza de quienes han lanzado críticas feroces contra la plantilla del metro".
Las cinco centrales convocantes -CC OO se autoexcluyó- quisieron proyectar ayer una imagen de unidad ante las crecientes críticas por parte de diversos agentes sociales y políticos. ELA es el sindicato mayoritario en el comité -lo forman cinco miembros de ELA, tres de CIM, tres de UGT, tres de CC OO, dos de LAB y uno de ESK-, que se ha convertido en el principal opositor del Gobierno vasco. Además del papel que asume en el largo conflicto del suburbano bilbaíno, ELA, junto a LAB, también abandonó la mesa de negociación de los recortes a los trabajadores públicos.
Además de las "desafortunadas" e "impropias" declaraciones del lehendakari, el comité criticó duramente las "mentiras" vertidas sobre la plantilla del suburbano y dijo haberle "chocado" los datos "falsos" sobre los salarios de los empleados, que, "en ningún caso", alcanzan los 42.000 euros anuales que señaló el lehendakari. Asimismo se preguntó por qué no se hacen públicos los salarios de la dirección.
Igualmente, los sindicatos opinan que se les ha querido "echar encima" a la opinión pública por la huelga de Santo Tomás, y matizaron que el conflicto "no se inicia el día 21, el verdadero origen es muy anterior".
El comité centra sus reclamaciones en cinco puntos. Así, denuncia el incumplimiento del acuerdo alcanzado el pasado 11 de julio al no haber contratado a los trabajadores eventuales y critica la unilateral reestructuración del área de mantenimiento. También reclama negociar el servicio de Nochebuena y el servicio general en 2012 y denuncia la cobertura de las reducciones de jornada.
[Los sindicatos convocantes ayer del paro de dos turnos en Euskotren aseguraron que el seguimiento fue "masivo" y cifraron el servicio prestado en un 30%. El paro, que afecta a las líneas de ferrocarril, los tranvías de Bilbao y Vitoria y algunos de los autobuses de Bizkaibus, se volvieron a repetir de cinco a siete de la tarde para denunciar la "irresponsable gestión" de la dirección.]
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