Los islamistas reivindican la victoria en la primera ronda de las legislativas egipcias

No es ninguna sorpresa para los egipcios. Los islamistas van en cabeza en el recuento electoral y se anuncian ya como los triunfadores de la primera vuelta de la fase inicial de las legislativas que deberán dar lugar al primer Parlamento elegido en democracia. Así lo anunciaron ayer en un comunicado en su página web. Y así lo confirman los sondeos de algunos diarios egipcios. El Partido de la Libertad y la Justicia (PLJ), brazo político de los Hermanos Musulmanes, estaría en primer lugar, seguido por los salafistas de El Nur y por los liberales del Bloque Egipcio.

Aunque los resultados parciales no serán hechos públicos hasta hoy, el PLJ indica que la provincia donde han recibido más votos en las listas cerradas (en las que se elige solo a partidos) ha sido la de Fayum, al sur de El Cairo. Precisamente en esta población se encontraron el día previo a los comicios papeletas marcadas con los candidatos islamistas, según el diario Al Masry Al Youm.

Las localidades del Mar Rojo (este), El Cairo y Asiut (sur) han sido las siguientes más favorables al PLJ. La formación de la cofradía religiosa destacó que existe una mayor competencia con su principal rival, El Nur, en Alejandría y Kafr el Sheij (noreste). Ambas poblaciones se caracterizan por ser muy conservadoras.

El PLJ ve también ganadores a los suyos en las listas abiertas (aquellas de las que se elige a los candidatos individuales). Los miembros de la hermandad van por delante en Helwan y Medinet Naser, en El Cairo; en Port Said (este) y en Asiut.

Mohamed Husein, un mecánico cairota, mostraba su alegría ante las previsiones. "Somos musulmanes, queremos un Gobierno musulmán. Los islamistas son justos y defienden a los pobres. Yo les voté y espero que muchos más les hayan votado", afirmaba. Husein cree que una vez lleguen al poder los Hermanos Musulmanes "todo se arreglará". "Hasta la gente se irá de Tahrir", aventuraba. En la plaza, la preocupación de algunos crecía al conocer los primeros sondeos, también entre los que no están acampados. "Queremos ver la televisión, escuchar música, fumar... Los islamistas lo prohíben todo", aseguraba Omar Mohamed, un instalador de aparatos eléctricos.

En esta primera vuelta electoral -de tres- se deciden 168 escaños de los 498 en disputa (otros 10 son de libre designación). Está previsto que la elección finalice el 10 de enero. Un largo proceso electoral que, sin embargo, no suscitaba ayer la atención de los manifestantes, más preocupados por el envío de 21 toneladas de gas lacrimógeno estadounidense en tres cargueros, el primero de los cuales se negaron a aceptar ayer los operarios del canal de Suez.

El portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Mark Toner, defendió el envío subrayando que no había pruebas de un mal uso del material. Durante las protestas de la semana pasada, los médicos que atendieron a los manifestantes destacaron el efecto letal de estos gases, que fueron empleados también contra los hospitales de campaña.