Mas allana el camino a Duran con ayudas a las cámaras de comercio

Josep Antoni Duran Lleida hará campaña hoy ante los empresarios de la Cámara de Comercio de Barcelona, a quienes volverá a pedir que ayuden a Convergència i Unió (CiU) a conseguir el concierto económico para Cataluña. Hasta ahora los empresarios han mostrado, con excepciones, una actitud un tanto distante ante la reivindicación de CiU, sobre todo porque no quieren abrir otro periodo de confrontación con el resto de España como ya ocurrió con el Estatuto.

Sin embargo, Duran acudirá hoy a hacer campaña con una ayuda nada desdeñable. Horas antes del almuerzo del candidato con representantes de las cámaras, los responsables de estas entidades habrán firmado con el Gobierno de CiU un acuerdo que puede ayudarles a salir de la difícil situación económica en la que han quedado desde que el Ejecutivo central suprimió la obligatoriedad del pago de las cuotas por parte de los empresarios. Estas cuotas significaban el 75% de los ingresos de las cámaras de comercio y sin ellas estas instituciones han tenido que someterse a una considerable operación de adelgazamiento.

El candidato de CiU pide hoy apoyo a los empresarios para el pacto fiscal

El plan del Gobierno catalán consiste, según fuentes de la cámara de Barcelona, en aprobar un convenio que dé cobertura a encargos de gestión en diferentes ámbitos. En otras palabras: que las cámaras puedan ser intermediarias entre empresas y Administración para conseguir permisos y homologaciones, y realizar otros trámites burocráticos. No está cuantificado el dinero que esto aportará a las cámaras, pero según el Gobierno catalán el acuerdo debe permitir que estas sigan desempeñando sus funciones.

El portavoz del Gobierno de CiU, Francesc Homs, calificó ayer de "casualidad" que Artur Mas firme el convenio con los empresarios el mismo día que Duran acude a pedirles el voto. Sin embargo, este episodio es uno más de la estrategia de CiU para lograr apoyos de todos los sectores para su proyecto de concierto económico.

Duran se esfuerza en recabar el favor de comerciantes y empresarios a su promesa estrella, el pacto fiscal. Desde el jueves, cuando inició su campaña, el democristiano se ha explicado ante los empresarios del Círculo de Economía, ha presentado con gran pompa el pacto fiscal en la Cámara de Comercio de Barcelona, lo ha defendido ante pequeños empresarios de Osona en un acto en Vic y continuará haciéndolo durante toda su campaña. Hoy volverá a hablar del concierto económico en la Cámara de Comercio, después del apoyo que ha dado Mas a esta institución, en el habitual almuerzo que los candidatos ofrecen en su sede durante la campaña.

Para ganarse el favor de los empresarios, el candidato apuesta por dos vías: rebajar el tono soberanista que imprimió Mas a su propuesta durante las elecciones autonómicas y convencer de los desequilibrios que provoca el actual modelo de financiación, ya sea denunciando la "excesiva" solidaridad catalana o comparando con el País Vasco. Pero no solo de comerciantes vive Duran: el democristiano, ante cualquier colectivo, defiende el pacto fiscal como solución a prácticamente todos los males que vive Cataluña. "El pacto fiscal sirve para reducir el paro, mejorar la sanidad y destinar recursos a la educación", aclaró a modo de resumen en su primer acto en la cámara. En función del colectivo al que se dirija, el democristiano modula sus argumentos: frente a los representantes de casas regionales, puso el foco en las desigualdades respecto al País Vasco e insistió en que el modelo no acaba con la solidaridad; en Tortosa (Baix Ebre), se valió de la polémica del trasvase para pedir "el trasvase del dinero". Incluso en un desayuno ante representantes del sector agrícola, centrado en la nueva Política Agraria Común (PAC) de la Unión Europea, el candidato fue capaz de meter la cuña. En cada acto, por pequeño que sea, Duran fía toda solución al pacto fiscal.