Felipe González ve un error sufragar la escuela concertada
El expresidente dice que si gana el PP habrá un cambio social dramático
Nada como la brillantez y el gracejo andaluz de Felipe González para levantar los alicaídos ánimos de los socialistas tras la encuesta del CIS que pronostica una mayoría absoluta del PP. El expresidente del Gobierno acudió ayer a L'Hospitalet a rescatar la moral de los simpatizantes del PSC, liderados por la ministra de Defensa y candidata, Carme Chacón, y en un mitin en La Farga invitó a sus electores a no dar la batalla por perdida hasta el último aliento. González hizo una encendida defensa del Estado de bienestar que el PSOE creó y tildó de "extraordinario" el sistema de sanidad pública y el de educación, aunque asumió que fue un error haber contribuido a sufragar la escuela concertada por su actual deriva.
"Algunos errores hemos cometido", confesó ante un público entusiasta de más de 5.000 personas. "Quieren hacer una escuela elitista y segregar niños y niñas; pobres y ricos; inmigrantes y no; de haberlo sabido, habría entregado todo el dinero a la escuela pública y el que quiera un colegio privado, que se lo pague", afirmó. La realidad es que ni el PSOE ni el PSC comparten ese discurso.
En un pabellón atestado, Felipe avisó del panorama que aguarda si gana el PP. "Me decía Celestino Corbacho (el exministro de Trabajo y exalcalde de L'Hospitalet) que quizá dejarán las pensiones no contributivas. Y no: lo van a tocar todo, todo", avisó mientras Chacón asentía. González instó a los ciudadanos a tener "memoria reciente", a recordar el legado social del PSOE. "El PP será un desastre gestionando la crisis. El primer año echarán la culpa de todo al Gobierno socialista y se pondrán a 10 o 12 puntos por debajo, pero nos habremos tragado un cambio de modelo dramático para la sociedad española". Fue implacable con Rajoy: dijo que su mayor mérito ha sido no dejar huella en su paso por cinco ministerios; le acusó de querer llevar a España otra vez por la senda de la burbuja inmobiliaria -"donde nos hemos pegado la galleta"- y de "mentir" al querer rebajar el déficit bajando impuestos manteniendo servicios.
González le dio así un espaldarazo a Chacón en una campaña en la que asume todo el protagonismo y en un escenario muy diferente del de 2008, cuando reunieron en el Sant Jordi a 20.000 personas con José Luis Rodríguez Zapatero en un papel estelar. González, ayer, solo le mencionó una vez y por el nombre para discrepar de él cuando dijo que bajar impuestos era también de izquierdas. Lo que quedó claro es que González no se rinde y recordó que los sondeos le fueron también a veces muy adversos y les dio la vuelta: "En 1993 iba 12 puntos por debajo y gané: y en 1996, 14 y perdí por un punto".
No se olvidó, por supuesto, del democristiano Josep Antoni Duran por acusar a los beneficiarios que cobran el PER y pasar el día en el bar. "Hay andaluces muy bravos que han hecho mucho por Cataluña. Tengo 70 años y hace 5 que tendría que estar jubilado. Trabajo todos los días y 20 veces más que lo que él se ponga a trabajar", señaló en medio de una atronadora ovación. Chacón, que se definió en su día como la "niña de González" en contraposición con la misteriosa "niña de Rajoy", asoció de nuevo a CiU y PP y les acusó de hacer "teatro" porque comparten programa: "Son como el dúo Pimpinela y su canción de Pega la vuelta".
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