"Me preocupan los lobos disfrazados de corderos"

Es actriz, productora, directora y le corre el teatro por las venas aunque también se entrega con pasión a sus trabajos en cine y televisión. Y en la gestión, como lo ha hecho en el último Festival de Teatro de Mérida, que ha dirigido. Blanca Portillo, madrileña de 48 años, una de las mujeres más respetadas de la profesión escénica, se muestra realista ante el futuro, algo que demanda a los políticos.

Pregunta. ¿A quién va a votar?

Respuesta. Aún no lo he decidido. La abstención o el voto en blanco, aunque parece que los políticos no lo tienen en cuenta, son manifestaciones democráticas y mensajes muy claros. En cualquier caso, si voto, será a la izquierda.

P. ¿Qué echa de menos en los mensajes de los candidatos?

R. Humildad. Mensajes honestos y realistas. Respeto por esa enorme cantidad de ciudadanos que no se sienten representados por ellos. Realismo.

P. ¿Qué le parece el Movimiento 15-M?

R. Creo que su existencia es lógica y necesaria. El sistema no funciona y la política obedece más a intereses y compromisos macroeconómicos que a los de la ciudadanía. La gente no se siente representada. La política se ha alejado de los ciudadanos.

P. ¿Qué problema le preocupa más ahora?

R. Los lobos disfrazados de corderos. Los mensajes falsamente positivistas, la idea de que en manos de unos, o de otros, todo va a cambiar. Creo que vivimos un momento de profunda crisis, no solo económica, sino de valores. Eso tiene una solución lenta, una transformación paulatina, y nos quieren hacer creer que todo va a cambiar en cuatro años.

P. ¿Teme algo si gana el Partido Popular?

R. Temo los recortes sociales, la privatización de lo público, y ese mensaje de que están en posesión de una verdad absoluta y que ellos, y solo ellos, pueden cambiar las cosas. Temo la falta de diálogo.

P. ¿Teme algo si gana el PSOE?

R. Que todo siga igual.