Vik Muniz de chocolate

No solo chocolate, sino también polvo, especias, azúcar, cables, dominós, juguetitos, recortes de revistas, mantequilla de cacahuete, caviar, diamantes, fragmentos de imágenes de vírgenes llorosas del Renacimiento italiano. Todo cabe en la exuberante mezcla de materiales que el artista brasileño asentado en Nueva York Vik Muniz (São Paulo, 1961) utiliza para fotografiarlos en una combinación que en algunos de sus mejores momentos resulta paródica. Una selección de más de 120 obras, desde que comenzó su carrera a finales de los ochenta, se puede ver ahora, hasta el 31 de diciembre, en una muestra en Lisboa, en la sede de la Colección Berardo (www.museuberardo.pt).

Dos fotografías brillantísimas llaman la atención. Elizabeth Taylor y Mónica Vitti. Su belleza refulge a través de cientos de pequeños diamantes que un coleccionista amigo de Muniz e involucrado en el mercado de las piedras preciosas le prestó para que realizara su serie Diva Diamante. Un ejemplo ideal para definir el arte de Vik Muniz, quien, según la crítica de arte Roberta Smith, "opera con impunidad en un Triángulo de las Bermudas que bordea lo comercial, lo popular y el puro arte".

El propio Vik Muniz considera que su campo de operaciones es la creación "de la peor ilusión posible", y la ilusión actúa sobre cualquier intercambio simbólico y cualquier actividad humana. Animado por la sensualidad óptica, las texturas, la reconstrucción de famosos cuadros del pasado (Degas, Courbet, Friedrich) o el juego crítico con el mundo de hoy. En este sentido, su mapamundi de restos de ordenadores, onírica basura cibernética, es una de las obras más sugerentes de la exposición lisboeta.

» Vik Muniz. Museu Colecção Berardo. Praça do Império. Lisboa. Teléfono: 00 35 12 13 61 28 78. Horario: de domingo a viernes, de 10.00 a 19.00; sábado, de 10.00 a 22.00. Entrada libre.