Heredia obvia la crisis interna y llama al PSOE a cerrar filas ante el 20-N

La dirección provincial del PSOE de Málaga persiste en su estrategia de hacer como si no pasara nada y obviar la crisis interna que, desde el fracaso en las elecciones municipales de mayo, se ha agudizado con la elaboración de las candidaturas para las elecciones generales y el caso de presunta corrupción en el Ayuntamiento de Ronda. La conferencia política del partido en la provincia celebrada ayer no es que no abordara el asunto, sino que la ejecutiva que preside Miguel Ángel Heredia se cuidó de que no hubiera la más mínima referencia a temas internos.

Ante la imposibilidad de abrir el debate, de recibir respuesta, los críticos que habían recogido firmas solicitando la dimisión de Heredia y del secretario de Organización, Francisco Conejo, han optado por aplazar hasta después de los comicios generales cualquier movimiento, pues si bien han exigido desde mayo un debate interno sobre la pérdida de respaldo social al partido, entienden que la campaña electoral no resulta el momento más adecuado para ello.

Blanco y Jiménez animan a sentir orgullo por la gestión socialista

En cierta manera, Heredia ha logrado imponer sus tesis. "Nos enfrentamos a una campaña electoral muy difícil, es el momento de centrarnos en las ideas y no en nosotros. Nuestra obligación es salir adelante como equipo, no individualmente", dijo en el discurso de clausura, y apeló: "Tenemos que estar más unidos que nunca".

La cuestión es que la conferencia política del PSOE de Málaga fue convocada por la ejecutiva en junio, en respuesta a quienes solicitaban un análisis autocrítico de la debacle electoral en las municipales. Pero el formato elegido (las conferencias suelen celebrarse para ultimar programas) más la inoportunidad del momento, convirtieron el encuentro en una jornada de convivencia de la que salieron consensuadas un buen puñado de propuestas, algunas de ellas ciertamente novedosas, pero que apenas tendrán recorrido porque justamente un día antes el comité federal del PSOE aprobó el programa electoral definitivo para el 20-N. Tendrán valor en cuento que compromisos socialistas, y es que, según Miguel Ángel Heredia: "No tenemos suficiente con todo lo que hemos hecho, queremos hacer más y tenemos ideas y propuestas de futuro".

También la presidenta del PSOE de Andalucía, Rosa Torres, que clausuró la conferencia, fijó en los ciudadanos las prioridades del partido. "Tenemos que hablar de lo que está ocurriendo ahí fuera y de lo que ayuda a resolver esta situación de complejidad", espetó. Y sobre la conferencia en si justificó que: "Hoy hemos hablado para que los socialistas malagueños tengamos un discurso propio, hecho por los malagueños para los malagueños porque tenemos la ambición de seguir sirviendo a la ciudadanía".

La conferencia política del PSOE de Málaga, a la que asistieron 337 de los 351 delegados designados, fue más bien un acto de salida de la precampaña electoral, en la que los militantes fueron consignados a no caer en el desaliento al que invitan las encuestas y a defender con orgullo la gestión de los últimos ocho años de Gobierno.

El vicesecretario general y ministro de Fomento, José Blanco, dijo al inaugurar la conferencia que el de José Luis Rodríguez Zapatero "ha sido el Gobierno europeo que más ha extendido la política social en tiempos de bonanza y el que más la ha protegido en tiempos de dificultad".

La primera candidata al Congreso por Málaga, Trinidad Jiménez, también miembro del Ejecutivo de Zapatero, invitó a "sacar el orgullo de partido". "Pongamos el alma socialista al servicio de la gente, con el orgullo de que hemos hecho las transformaciones más importantes de este país, saquemos un poco de alegría, un poco de optimismo y un poco de ilusión en esta campaña".