El control vial de Almería está en el aire por un litigio con la concesionaria
El Ayuntamiento intenta rescindir el contrato con Telvent de la Ciudad Digital
El control del sistema que regula los circuitos y flujos de los semáforos de Almería está en piloto automático, y así permanecerá varios días hasta que el Ayuntamiento no se haga con el mando tras el abandono del servicio por parte de la empresa concesionaria de la Ciudad Digital, la UTE Telvent-Inabensa.
La entidad financiera y el Consistorio se encuentran a las puertas de un contencioso legal después de que la Administración local haya iniciado el proceso de rescate de la concesión al comprobar que la empresa no cumple con el trabajo encomendado desde 2004, fecha en la que se suscribió la concesión por 20 años y un canon anual de dos millones de euros por mantenimiento del servicio.
La empresa 'peinó' las oficinas y se llevó llaves, códigos y claves digitales
Los trabajos de la Ciudad Digital incluyen el control semafórico, el servicio de transmisiones de la Policía Local y la puesta en marcha de la Administración electrónica. Esto último no ha funcionado en ningún momento. Cualquier tramitación, por minúscula que sea -como la inscripción a un taller de pilates- ha de pasar por colas en una ventanilla municipal y con papel en mano.
La Ciudad Digital se encuentra, físicamente, en un edificio situado en la urbanización de El Toyo. El Ayuntamiento comunicó la decisión de rescatar la concesión, pero no pudo entrar al edificio hasta hace dos días gracias a una orden judicial. Sin embargo, se encontraron con que Telvent-Inabensa había peinado las oficinas llevándose mobiliario, llaves, códigos y claves de los programas informáticos. "La situación es muy incómoda. Han desmantelado el servicio y tardaremos unas 72 horas en hacernos con el control", calcula la concejal de Desarrollo Económico, Empleo y Turismo, Ana Martínez Labella.
Durante el trámite de audiencia que ahora se inicia con el proceso de rescate de la concesión, el Ayuntamiento propondrá resolver el contrato de manera parcial: "Solucionar el contrato en la parte digital, y quedarnos con el control del tráfico y las transmisiones de la Policía Local", servicio que tampoco ha llegado a funcionar al 100% desde 2004. Los agentes se quedan sin cobertura en sus dispositivos de comunicación interna en determinadas zonas de la ciudad y han de utilizar sus teléfonos móviles para llamar a otros compañeros y a la Jefatura. En casos de urgencia, esta situación es especialmente controvertida. "Hay zonas de sombra en la ciudad por falta de repetidores que no se han instalado", afirma Antonio Guardiola, del sindicato CSI-CSIF. "Se producen desfases en los ciclos semafóricos, desajustes y es necesaria la presencia de un agente en la Ciudad Digital para controlar los monitores y dar indicaciones a otros agentes" para reconducir el tráfico en una capital en la que conviven cerca de 200.000 personas. La presencia de un agente en la Ciudad Digital se cumplió inicialmente, pero actualmente no existe dicha supervisión. El Ayuntamiento reconoce una deuda de unos seis millones de euros, pero exige justificación mediante facturas del trabajo que aseguran haber realizado, pero que no se ha recepcionado.
La oposición municipal denuncia la gestión municipal. El PSOE pidió el rescate del servicio en 2008 y, nuevamente, en febrero de 2011, además de un Pleno extraordinario en el que el alcalde "dé las correspondientes explicaciones" ante un asunto "de tal envergadura", expone el viceportavoz socialista, Joaquín Jiménez. "Es un hecho gravísimo que va a traer consecuencias económicas al Ayuntamiento en un momento muy crítico para el aumento de un gasto innecesario", valora el portavoz de IU, Rafael Esteban.
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