El último 'mitin' de CAP
Los socialdemócratas venezolanos reciben el cadáver de su dirigente histórico Carlos Andrés Pérez, fallecido en 2010 en Miami, con vítores y cánticos
Los socialdemócratas venezolanos han recibido el cadáver de uno de sus máximos dirigentes, Carlos Andrés Pérez (CAP), en medio de vítores y cánticos. El regreso del hombre que gobernó en dos ocasiones (1974-1979 y 1989-1993), después de una larga disputa familiar sobre dónde descansarían sus restos, ha removido las aguas políticas venezolanas justo un año antes de que se celebren las elecciones presidenciales donde el actual mandatario, Hugo Chávez, busca una segunda reelección.
Pérez murió el 25 de diciembre de 2010 de un ataque cardiaco, a los 88 años, en la ciudad de Miami, donde vivió exiliado durante 12 años al abrirse una nueva causa judicial en su contra. Su cadáver llegó a las nueve de la noche (hora local, 3.30 de la madrugada del miércoles en horario peninsular), y posteriormente fue trasladado a El Paraíso, la urbanización de Caracas donde familiares y militantes del partido Acción Democrática le rindieron homenaje póstumo. A ellos se han sumado miles de personas que desde las primeras horas se han acercado al lugar del velatorio para dar el último adiós a quien fuera uno de los líderes socialdemócratas más carismáticos y controvertidos de América Latina.
Una disputa familiar sobre el lugar de sepultura retrasó la llegada de sus restos
Su muerte tampoco estuvo exenta de polémica. Una amarga disputa entre su esposa, Blanca Rodríguez, y su compañera sentimental, Cecilia Matos, sobre dónde sería enterrado el expresidente obligó a colocar su cadáver en la unidad de refrigeración de una funeraria, donde estuvo seis meses, antes de que un juez ordenara que fuese trasladado a una cripta temporal del Flager Memorial Park de Miami mientras concluía el litigio entre sus herederos.
Tras el ascenso a la presidencia de Hugo Chávez, en 1999, la Fiscalía General de Venezuela anunció que Carlos Andrés Pérez y Cecilia Matos serían acusados por nuevos cargos de corrupción. Ambos marcharon al exilio. Doce años después, Matos aseguró que Pérez, poco antes de morir, pidió no ser incinerado ni enterrado en Venezuela hasta que su acérrimo enemigo político, Chávez, no saliera del Gobierno.
Su aún esposa legal, Blanca Rodríguez, dijo lo contrario: que su voluntad fue siempre la de ser sepultado en Venezuela. Entonces comenzó el litigio que se resolvió el 17 de agosto, mediante un acuerdo amistoso.
El féretro de Pérez voló un día entero desde Miami a Atlanta y de Atlanta a Caracas, y fue recibido por cientos de simpatizantes que coreaban el tema de la campaña electoral que en 1974 le llevó por primera vez a la Presidencia: "Ese hombre sí camina /va de frente / y da la cara". De esa época eran las fotos -donde se le veía con largas patillas y traje blanco- que adornaban el salón donde se realiza el velatorio hasta el jueves. A esa época también pertenece el término "Venezuela saudita", que engloba la bonanza petrolera y el derroche que caracterizó su primer mandato.
Carlos Andrés Pérez volvió a la presidencia en 1989, en medio una grave crisis económica y del derrumbe del sistema tradicional de partidos. En este segundo periodo ocurrió la revuelta social de 1989 conocida como el caracazo y hubo dos intentos de golpe de Estado, uno de ellos liderado por Chávez. Fue destituido en 1993 antes de culminar su mandato y condenado a dos años y medio de prisión en 1996 por cargos de malversación de fondos. Fue durante esos días cuando Pérez se separó de Blanca Rodríguez. Nunca se divorció.
El cuerpo de Pérez será velado en la casa sindical de Acción Democrática hasta este jueves, cuando lo trasladarán al Cementerio del Este en Caracas para enterrarlo junto a su hija, Thaís, que murió hace 15 años. Ambas familias han estado de acuerdo en que no quieren para él honores de jefe de Estado.
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