Basagoiti alarga su doble juego con el Gobierno López y el PNV

El presidente del PP del País Vasco, Antonio Basagoiti, se ha acostumbrado a manejar un doble guión con el Gobierno de Patxi López y el PNV para así disponer de un hueco propio dentro de la escena política. Ayer lo volvió a demostrar en sus declaraciones durante la visita al Instituto al Instituto vasco de competitividad Orkestra en San Sebastián, donde acudió acompañado por el parlamentario Borja Sémper y el concejal donostiarra Ramón Gómez.

Basagoiti no duda en reafirmar el apoyo de su partido al pacto político que sustenta al Gobierno López después de una andanada previa. En esta ocasión censuró la actitud de los consejeros de Educación e Industria, Isabel Celaá y Bernabé Unda, respectivamente. El líder popular denunció la intervención de la consejera en la apertura del curso académico en Bergara, quien, en su opinión, "utilizó un foro institucional académico y público para hacer partidismo". Basagoiti añadió que si él fuera consejero de Educación "no se le ocurriría en un acto público hablar de la política de los conservadores, de los progresistas, de los socialistas".

Critica el discurso político de Celaá en la apertura del año escolar en Bergara

"Pido a Urkullu que no haga de Rappel porque no acierta ni una"

En cuanto a Unda, indicó que "si fuera consejero de Industria nunca se me ocurriría llamar a empresarios importantes vascos a realizar un acto con un candidato a la presidencia del Gobierno", en relación a la reciente reunión de Pérez Rubalcaba en Bilbao.

Para justificar su actitud, Basagoiti señaló que "una cosa es que apoye al Gobierno en la convivencia, en la normalidad y estabilidad de Euskadi y otra cosa es que no comparta y le critique cuando crea que no lo han hecho bien". A su vez, añadió que "en la política fiscal el PP va a intentar buscar el acuerdo con el Gobierno y con el PNV".

En relación con el PNV, Basagoiti alabó la gestión presupuestaria de los anteriores gobiernos con relación al "derroche de los progresistas". Sin embargo, compensó con una crítica directa al presidente del EBB, Iñigo Urkullu, a quien pidió que "no haga de Rappel" porque "dijo que este Gobierno duraba dos meses y ya lleva dos años y medio, porque dijo que el Gobierno vasco iba a durar hasta las europeas y lleva dos años y medio, porque también llegó a contar que este Gobierno iba a durar hasta las municipales y sigue durando".

Por lo tanto, instó al dirigente del PNV que "se deje de hacer el futurólogo, que se deje de enredar" porque "no se entera de nada". A su juicio, "en este país hace falta entendimiento y pacto, estar ocupándonos de la economía, hace falta arrimar el hombro". "No estamos ni para peleas, ni para enredos, ni para meternos el dedo en el ojo". Según enfatizó, es preciso "estar a la altura de las circunstancias", lo que significa que "tenemos que entendernos más y mejor".