El centro Príncipe Felipe despide a los científicos en formación

El Centro Príncipe Felipe, el buque insignia de la Generalitat valenciana en materia de investigación, ha decidido despedir a sus científicos en formación. El comité de empresa ha presentado una denuncia ante la Inspección de Trabajo al considerar que el centro incurre en fraude de ley y viola el Estatuto del Personal Investigador en Formación aprobado por el Gobierno en 2006. El Príncipe Felipe ha mantenido a los jóvenes investigadores trabajando durante dos años bajo la figura de becarios y cuando la ley lo obligaba a transformar dicha vinculación en un contrato laboral por otros dos años, la dirección ha optado por prescindir de ellos, afirmó el comité de empresa.

El motivo alegado por la dirección ha sido la delicada situación económica que atraviesa, según Rafael Pulido, portavoz del comité. La dirección afirmó, en cambio, que la decisión de desprenderse de los investigadores respondió a que trabajaban en líneas "no productivas" para el centro, al tiempo que reivindicó la legalidad de la medida.

Dos de los investigadores en formación ya han recibido el aviso y los otros cuatro lo harán a medida que venza su periodo de beca, según Pulido. El representante de los trabajadores destacó que la decisión "trunca sus carreras, dejándoles con las tesis doctorales a medias". Los despidos afectan a todos los científicos en formación contratados del propio Príncipe Felipe, pero no a otros que trabajan en el centro bajo la misma fórmula con contratos de otros organismos.

Bajos salarios

La diferencia entre los dos años de beca y los dos años de contrato laboral es muy pequeña a nivel salarial. En ambos casos, el sueldo es muy modesto. La ventaja para los científicos es que durante el segundo periodo cotizan a la Seguridad Social, lo que encarece el coste para la empresa que los tiene contratados.

El comité de empresa lamentó que el despido de los seis jóvenes investigadores contraste con otro tipo de gastos "injustificados" y que "la transparencia en las cuentas económicas del centro en los últimos años deja mucho que desear, y ha sido motivo de repetidas denuncias públicas y ante la inspección de trabajo". El Príncipe Felipe replicó que sus cuentas han sido revisadas "por un auditor externo, aprobadas por el patronato, enviadas al comité de empresa y depositadas en el Protectorado de Fundaciones".