Carla Bruni no quiere focos para su bebé

Dentro de apenas mes y medio la primera dama de Francia, Carla Bruni, dará a luz al primer bebé fruto de su matrimonio con el presidente Nicolas Sarkozy. Le queda de embarazo el mismo tiempo que ha estado apartada de la escena pública. Porque Bruni ha llevado su embarazo con discreción. Hasta ahora. Al final la cantante y modelo ha hablado ante las cámaras de la televisión privada TF-1, que emitió la noche del domingo la esperada entrevista. Recién llegada al palacio del Elíseo tras sus vacaciones veraniegas en la mansión familiar del sur de Francia, Bruni explica que protegerá por encima de todo la privacidad de su próximo hijo, del que no permitirá que se publique ninguna fotografía. "La exposición mediática es una opción de adulto", cuenta. También revela que no sabe si será niño o niña y que prefiere "guardar la sorpresa hasta el final".

Cuando se le pregunta si a estas alturas puede confirmar oficialmente el embarazo -tema tabú hasta ahora para el presidente francés y su esposa-, respondió: "Llegado un momento resulta difícil ocultarlo", bromeó. Y es que desde que saltó la noticia a finales de abril, la pareja presidencial se ha negado a comentar cualquier información sobre el que será su primer hijo en común.

Para justificar su silencio explica: "Ha sido una suerte de reflejo, de madre protectora, al igual que he protegido siempre a mi primer hijo", cuenta. Bruni tiene un niño, Aurélien, de 11 años, fruto de su relación con el filósofo Raphaël Enthoven. El pequeño vive con su madre y Sarkozy.

Entre los rumores que se han sucedido desde que el embarazo se descubrió -no estaba confirmado pero era evidente- está el de que esperaba gemelos. Ahora la prensa francesa da por hecho que el bebé será otro varón -Sarkozy es ya padre de tres niños, abuelo de otro, y Bruni tiene a Aurélien-. "Ni yo misma lo sé, por lo que parece que la prensa está más al tanto que yo", dice entre risas la futura mamá.

El nacimiento será el primero de la historia en el Elíseo y tendrá lugar apenas seis meses antes de las elecciones presidenciales de 2012, cuando el futuro papá esté en plena precampaña. Eso si se presenta a la reelección, algo que todos los analistas dan por hecho aunque, según Bruni, la decisión todavía no está tomada.

Cuando se le pregunta si su marido estará en el parto, ella responde con un calmado "espero", y cuando se le insinúa que la agenda de su marido podría dejarle poco tiempo para el pequeño, se queda pensativa: "No lo había pensado". Y reflexiona: "Aunque siempre encuentra tiempo para estar con la familia".

Durante la entrevista, de 10 minutos, la primera dama de Francia aprovecha para explicar que está recaudando fondos para luchar contra la terrible hambruna que sacude el Cuerno de África. Ese fue el pretexto para volver a escena.