Los recortes sociales llegan a los centros de día de mayores
Bienestar aplaza la apertura de equipamientos construidos
Los ajustes presupuestarios de la Generalitat de Cataluña no afectan solamente a servicios existentes o proyectos en marcha. Ahora también han alcanzado a equipamientos ya construidos que no pueden abrir sus puertas por falta de presupuesto. Esto es lo que sucede en Sant Celoni (Vallès Oriental), donde el centro de día Indalecio Losilla todavía no ha entrado en funcionamiento, a pesar de que fue inaugurado en marzo. El Ayuntamiento dice que no contaban con la subvención de la Generalitat, ya que los presupuestos para 2011 no se aprobaron hasta julio.
Tener los presupuestos prorrogados no había sido un problema hasta ahora que las administraciones tiraran hacia delante los proyectos. Pero con la crisis económica actual y con la intención de la Generalitat de realizar notables recortes presupuestarios, se han congelado algunos planes.La inexistencia de unas cuentas autonómicas vigentes ha servido de excusa para atrasar la puesta en servicio del centro de día Indalecio Losilla de Sant Celoni, que costó unos 700.000 euros a cargo del Plan E, a pesar de que el equipamiento fue inaugurado a bombo y platillo el pasado 18 de marzo (dos meses antes de las elecciones municipales), con la presencia del consejero de Bienestar y Familia, Josep Lluís Cleries.
El hospital de Sant Celoni (encargado de la gestión del centro de día) llegó incluso a publicar un díptico informativo anunciando que el nuevo centro de día se abriría el 4 de mayo. Francesc Deulofeu, exalcalde de Sant Celoni, asegura que el retraso en la apertura del centro se debe a que "no había asignación presupuestaria", hasta que las cuentas de la Generalitat para 2011 se aprobaran.
El centro cuenta con 40 plazas, la mitad de las cuales son privadas y cuestan 900 euros mensuales. La cuota de las plazas públicas todavía no está fijada porque no se ha firmado el convenio con la Generalitat, que debe establecer cuál será la subvención que otorga la administración autonómica.
El concejal de comunicación de Sant Celoni, Jaume Tardy, asegura que el acuerdo no se ha firmado por temas "burocráticos" surgidos a partir de unas pequeñas modificaciones en las obras que obligó a hacer la Generalitat y que han impedido que hoy por hoy el Departamento de Bienestar todavía no haya dado el visto bueno definitivo al centro.
El hospital de Sant Celoni contradice esta versión y asegura que los detalles que había que cambiar de la construcción "eran tan mínimos que no impedían su apertura". El exalcalde también reconoce que el centro ya se podría haber puesto en marcha ofreciendo solo las 20 plazas privadas, pero "abrir a medio gas hubiera supuesto una gestión menos eficiente y más costosa".
Más prisa tenía el antiguo gobierno municipal para inaugurar el centro, justo dos meses antes de las elecciones. Deulofeu reconoce que el Ayuntamiento podía haber decidido retrasar el acto ante la inexistencia de la subvención autonómica, "pero teníamos que hacer el acto para enseñar a la gente el trabajo que habíamos hecho". La Generalitat prevé que finalmente el centro se abra en septiembre.
Los problemas presupuestarios y el cambio de gobierno municipal también han atrasado la apertura de un centro de día en Sant Julià de Vilatorta (Osona). La construcción del equipamiento, que ha supuesto una inversión de casi 700.000 euros, finalizó el pasado mes de febrero. El alcalde del municipio, Joan Carles Rodríguez, explica que el anterior gobierno local aducía el retraso de su apertura al hecho que la Generalitat se negaba a firmar el convenio con el Ayuntamiento por falta de presupuesto. Rodríguez también reconoce que el nuevo Consistorio todavía no se ha puesto en contacto con el Departamento de Bienestar Social para firmar dicho acuerdo y temen recibir también una nueva negativa debido al contexto de dificultades económicas y recortes presupuestarios.
De hecho, desde el área que preside Josep Lluís Cleries aseguran que no tienen previsto rubricar ningún convenio con Sant Julià de Vilatorta, ya que "analizando la demanda del municipio y su área no hay necesidad de concertar más plazas públicas".
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