Cine de verano en un jardín de olivos y de óperas primas
Conserva intactos todos los olivos desde la época en la que el catedrático José Castillejo Duarte (1877-1945), ecologista manchego, amante de la tierra y promotor de la idea de vivir en las afueras, en el ambiente sano y campesino del entonces pueblecito de Chamartín de la Rosa, compró el llamado Olivar del Balcón en 1917 (hoy la calle Menéndez Pidal, 3 bis).
Allí, ahora, casi un siglo después, entre los olivos, se multiplican las actividades culturales (música, teatro, cine...). Desde el pasado 18 de julio y hasta el próximo domingo, el sitio lo han ocupado siete películas españolas, un ciclo de siete óperas primas de directores de nuestro país: María y yo, dirigida por Félix Fernández de Castro; Brutal Box, de Óscar Rojo Martín; Planes para mañana, de Juana Macías; Blog, de Trapé; Bon Appètit, de David Pinillos; y hoy y mañana, respectivamente, se proyectan: El mal ajeno, de Oskar Santos, y Pájaros de papel, de Emilio Aragón. Una ocasión para repasar el talento patrio, que de eso se trata.
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