López exigirá hoy a Garitano mayor implicación para el fin de ETA

El lehendakari, Patxi López, tiene intención de transmitir hoy en privado al diputado general de Gipuzkoa, Martin Garitano, la exigencia que formula en público a la izquierda abertzale para que adopte una posición clara y nítida en contra del terrorismo, que incluye el llamamiento a la desaparición de ETA. El de hoy no será el primer encuentro de ambos -coincidieron en un acto oficial en Mutriku hace dos semanas- pero sí su primera reunión formal y frente a frente.

Aunque el tema de la violencia no está en la agenda de las tres reuniones que por separado mantiene hoy López con cada uno de los diputados generales, el lehendakari no puede, en el caso del representante de Bildu, dejar de lado esa cuestión de principios. Por más que Garitano no acuda a Lehendakaritza como dirigente de la coalición abertzale, en su caso es "un tema que no puede evitarse", dijeron ayer fuentes del Gobierno. "Estoy segura de que dentro de la conversación le trasladará esa cuestión", apuntó la portavoz del Gobierno, Idoia Mendia, al ser preguntada sobre el particular en su comparecencia habitual de los martes.

La nueva situación reta por igual a los cuatro partidos principales

Empleo, fiscalidad, políticas sociales y ley municipal están hoy en la agenda

Por lo demás, el lehendakari tiene previsto el mismo guión para Garitano que para los diputados generales de Bizkaia, José Luis Bilbao (PNV), y Álava, Javier de Andrés (PP). Los tres recibirán el mismo documento, que contiene las líneas generales en las que el Gobierno quiere abordar cuatro materias: la fiscalidad, un pacto para una política común de empleo, los servicios sociales y todo el espacio sociosanitario y las duplicidades entre administraciones.

López les informará también sobre la Ley Municipal, que el Ejecutivo aprobará tras las vacaciones: el lehendakari aclarará a los diputados generales que la norma se ha elaborado teniendo en cuenta las aportaciones de la Asociación Vasca de Municipios, Eudel, y que no pretende socavar ni recortar sus competencias, sino proporcionar lugar y voz a los ayuntamientos, indicaron fuentes oficiales.

En materia fiscal, el documento pone más el énfasis en la lucha contra el fraude, los planes conjuntos de inspección y la coordinación e intercambio de datos que en los cambios impositivos, más difíciles de consensuar, aunque también se contemplan.

Mendia adelantó que el lehendakari aborda como "una gran oportunidad" la etapa que se abre con la nueva representación al frente de las Diputaciones. La portavoz resaltó también la trascendencia que tendrán los acuerdos que se logren, porque implicarán no solo a las instituciones, sino a los cuatro partidos distintos que gobiernan en cada una de ellas. El lehendakari confía en que esos consensos se harán posibles y aborda los encuentros de hoy "con ilusión y optimismo".

Lo cierto es que las reuniones de hoy -a las 10 José Luis Bilbao; Martin Garitano, hora y media después; y, por último, Javier de Andrés inauguran un auténtico cambio de época en la relación institucional de fuerzas del país. La incorporación a las responsabilidades de gobierno del PP en Álava y Bildu en Gipuzkoa conforma el mapa de poder más plural y representativo que ha tenido nunca la comunidad autónoma. Previsiblemente, también el que más esfuerzos de consenso exigirá. De ahí la importancia hoy de la primera toma de contacto.

El vuelco que ha experimentado en dos años el reparto institucional lo ilustra el hecho de que el diputado general de Vizcaya, José Luis Bilbao, vaya a ser hoy el único representante que le queda al PNV dentro de un entramado que en 2009 controlaba en exclusiva. Además de esa pérdida de la hegemonía en los poderes ejecutivos del país, el interés de la nueva situación reside en que por primera vez están, allí donde se toman las decisiones, los cuatro partidos en los que la voluntad ciudadana parece ir queriendo simplificar su representación y el mapa político vasco. Es significativo que esa voluntad haya provocado que la presencia de los dos partidos más centrados -PNV y PSE- se vea complementada por la de los dos más alejados entre sí, PP y Bildu. Del mismo modo, resulta relevante que esa situación se dé en un momento que aúna las pertinaces dificultades de la crisis económica y la escasez de recursos públicos que ocasiona, y lo que parece el fin de ETA. El lehendakari comparecerá por la tarde para valorar los encuentros.