La polémica de las mezquitas precipita una ley de culto

El Gobierno vasco culminará a final de mes el borrador del anteproyecto de ley de libertad de culto, una normativa que regulará cuestiones como la construcción de centros religiosos, los enterramientos o las restricciones de algunos alimentos en los comedores escolares debido a las creencias religiosas.

La portavoz del Gobierno vasco, Idoia Mendia, anunció ayer, durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, la iniciativa, que no está incluida en el calendario legislativo del Ejecutivo, pero que ha sido solicitada después de las polémicas por la apertura de dos mezquitas en Bilbao y Vitoria.

Se trata de dar una respuesta legal "a determinadas cuestiones prácticas que se generan en la vida diaria", señaló la portavoz, que incidió en que no se van a prohibir los centros de culto, sino garantizar su creación de forma ordenada. El proyecto de ley que aprobará el Ejecutivo llegará al Parlamento para su aprobación durante el primer trimestre de 2012. Las cuestiones que se incluirán en la ley fueron tratadas en el Consejo Musulmán Vasco la pasada semana, con la participación de Mendia y el lehendakari.

Si el trámite parlamentario no se prolonga en exceso, a lo largo del próximo año Euskadi podría tener una ley de estas características. Cataluña ya aprobó una norma similar hace dos años, con la que se regularon las condiciones para establecer lugares de culto. El Ejecutivo autonómico optó por publicitar la elaboración de la nueva ley un día después de que el alcalde de Vitoria, el popular Javier Maroto, solicitara públicamente que se elabore un documento de este tipo. Maroto hizo esta solicitud al retomar un tema del que hizo bandera durante la campaña electoral de las últimas elecciones, la construcción de una mezquita en el barrio de Zaramaga de la capital vasca.

Imperdonable

El entonces candidato rechazó la ubicación de la mezquita, a pesar de que el colectivo paquistaní que prevé instalar en este barrio su centro de culto tiene la licencia pertinente. El pasado miércoles se vivió un nuevo episodio en los enfrentamientos entre los impulsores de la mezquita y algunos vecinos, ya que desconocidos forzaron la puerta del local para lanzar en él carne de cerdo y sangre. El Gobierno vasco censuró la pasada semana estos hechos, que la propia portavoz calificó ayer como "imperdonables".