Demasiado rápido
Empecemos por el final: Ánimo, Rafa; eres un crack y siempre lo seguirás siendo.
A partir de ahí analicemos qué ha ocurrido en la final de Wimbledon. Durante los días previos detecté que en el grupo de trabajo de Rafa estaban muy animados viendo el gran nivel del mallorquín durante el torneo porque consideraban que el factor mental, las cuatro derrotas seguidas ante Novak Djokovic, no iba a ser determinante en el encuentro. Había bromas y buen rollo en los entrenamientos. El clima era distendido, cuando suele haber más tensión si Rafa no está jugando bien o tiene dudas. Creo que él mismo pensaba que el encuentro iba a ser diferente, que imaginaba un encuentro apretado, de otro tipo. Luego, llegó la final. No he visto que tuviera muchas posibilidades de dar la vuelta al marcador. ¿Por qué? Para sus intereses, considero que todo ha ido demasiado rápido.
A Rafa le gusta que todo sea más largo, que haya más pausas. Aunque es difícil saber cómo habría podido parar el partido, ese no era su ritmo
Los dos primeros sets han durado 74 minutos. El tercero también lo ha ganado él muy rápidamente, en media hora exacta. Al final, han sido solo 2h 28m de partido. A Rafa le gusta que sea todo largo, que haya más pausas. Aunque es difícil saber cómo habría podido parar un poco el encuentro, ese no era su ritmo.
Para mí, la clave estuvo en el punto de break del primer juego del cuarto set. Ahí, Djokovic le había abierto la puerta. Rafa entró. Y, cuando parecía que todo se igualaba, que ese break le metería definitivamente en el partido, no consiguió convertirlo. Fue la clave: Rafa iba para arriba y el serbio para abajo. Hasta entonces, el partido siempre lo vi más controlado por Djokovic, más en su mano. Empiezo a pensar que a Novak le gusta el desafío de Rafa, que se siente a gusto disputándole la supremacía, alterando el orden establecido.
Hay quien ahora quiere comparar la ventaja mental que tiene Rafa sobre Roger Federer con la que supuestamente tendría Djokovic sobre él. Yo no lo veo. Cuando un rival te ha ganado tantas veces, incluso en tu territorio, en la tierra, el factor mental ya es algo que no tienes a favor, desde luego. Sabes que, en los momentos importantes e igualados de un partido, esos instantes que necesitan de algo más, no tendrás a favor la parte mental. Quizás lo acusa un poco en el sentido de que el serbio no se pone nervioso en los momentos difíciles. Pero no me parece comparable. Yo no lo veo mentalmente marcado. Rafa ha ganado 16 veces al serbio [por 12 triunfos de Djokovic]. Sabe cómo hacerlo. Creo que ahora sus duelos son una cuestión de inspiración; que, aunque ahora no encuentra la manera de superarle, la cosa puede cambiar. Simplemente, Novak está inspiradísimo.
En mi caso, me pasó con Federer, a quien nunca pude ganar, pero son historias distintas. Había una diferencia de nivel. Yo nunca luché con nadie por los grandes o por el número uno. No era cuestión de táctica. Rafa es muy diferente a mí. Mentalmente, no hay comparación posible.
El Abierto de Estados Unidos está a la vuelta de la esquina y todo el país estará contigo. ¡Ánimo y suerte!
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