Montilla acusa a Puig de imprevisión y de "no actuar cuando tocaba"

"¿Cuántos minutos habría tardado CiU en pedir dimisiones si la situación del miércoles en el Parlament se hubiera producido hace un año?", se preguntó ayer el primer secretario del PSC, José Montilla. "Pues ellos también habrán de dar explicaciones, porque la imagen que ofrecieron Cataluña y sus instituciones fue lamentable, absolutamente tercermundista", se respondió.

Para Montilla, los responsables de los graves disturbios del parque de la Ciutadella fueron los violentos y el Gobierno de Artur Mas. Sobre los primeros dijo que eran "una minoría que no quiere cambiar las cosas y que no tiene que ver con los indignados". En cuanto al Ejecutivo de CiU, le reprochó no prever que podía ocurrir una situación así y censuró al consejero de Interior, Felip Puig, por sacar pecho sin motivo. "No sé qué entendió del 27 de mayo. Se equivocó ese día por intervenir cuando no tocaba -en referencia al desalojo de la plaza de Catalunya- y se equivocó el día del Parlament por no intervenir cuando tocaba, porque se iba a discutir una cosa tan importante como los Presupuestos", remachó.

El congreso del PSC se celebrará del 28 al 30 de octubre en Barcelona

Montilla realizó estas afirmaciones durante el consejo nacional del PSC celebrado ayer y que convocó el congreso del partido para el 28, 29 y 30 de octubre en Barcelona. Sera un cónclave que elegirá una nueva dirección y que Montilla reclamó que fuese "abierto, participativo, desde abajo, pero pensando en los problemas de la gente". Por eso reclamó a la militancia que no se obsesionara con "organigramas, estatutos, reglamentos y personas", sino en dar respuestas a la ciudadanía. Montilla aludía así a los movimientos existentes entre algunos sectores, que reclaman mucha más participación en el congreso. En principio, habían de acudir un millar de delegados y al final serán 2.476, incluyendo observadores e invitados, que tendrán voz en el debate congresual tras una modificación del reglamento.

El líder socialista analizó también los resultados de las municipales y admitió que en algunas localidades había existido un claro trasvase de votos del PSC hacia el PP e incluso hacia la xenófoba Plataforma per Catalunya. La sangría de votos socialistas, que ha pasado de tener alcaldes sobre el 75% de la población catalana al 33%, se debe, según Montilla, a una "pérdida de credibilidad y de atractivo" del proyecto del PSC. "Éramos una excepción en Europa, con más de 30 años en algunas alcaldías y hemos dejado de serlo", dijo.

Sin embargo, añadió que la derrota electoral del PSC se ha agravado con los pactos municipales, pues los socialistas han perdido 20 alcaldías en municipios donde fueron la lista más votada. "CiU ha pactado con el PP allí donde han sumado", dijo Montilla, que en varias ocasiones arremetió contra Xavier García Albiol, alcalde de Badalona, "el candidato xenófobo que incita a las más bajas pasiones y que ha atizado el odio". El líder socialista también desmintió un supuesto acuerdo postelectoral con CiU. "Nunca, nunca, nos ofrecieron pactar alcaldías a cambio de apoyar los Presupuestos", dijo. "Nos habría gustado apoyarlos, pero nunca han hecho ningún gesto para ello. Nos pedían un cheque en blanco, un contrato de adhesión, y así no podíamos", explicó Montilla, quien en otro momento denunció un intento de CiU por controlar los medios de comunicación públicos. "Cuando gobernábamos nosotros pidieron 12 miembros en la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales para ser más plurales y los pusimos, pero ahora resulta que son muchos, porque de lo que se trata es de controlar y modificar las leyes", dijo.