Bieito ofrece un oratorio barroco pagano con Abba y Bach

"Un oratorio barroco pagano". Así define Calixto Bieito su espectáculo Voices, en escena este fin de semana en el teatro Romea de Barcelona como parte del festival Grec, que empieza el viernes. Compuesto de canciones y recitativos, como mandan los cánones, el singular oratorio -creado en las brumas climatológicas y espirituales de Escandinavia-, mezcla, sin embargo, en un abigarrado y atractivo collage material tan diverso como Bach y Abba, lo trascendente y lo banal, para desgranar, señala el director, un discurso sobre el dolor y el vía crucis de la humanidad. Una pieza oscura, admite Bieito, "pero con esperanza, mucha esperanza".

Es pues este hiperbóreo y venido del frío un oratorio descristianizado, en el que la referencia no es Jesucristo, sino el mal de vivre humano, que pasa revista a "cómo la gente nos enfrentamos a la enfermedad, la desgracia y la culpa". "He estudiado en los jesuitas y tengo mucha formación barroca", apunta Calixto Bieito.

Con dramaturgia del propio Bieito y Marc Rosich, Voices, estrenado en mayo pasado en Noruega, utiliza numerosas canciones y textos, con nombres que van de Primo Levi o Pavese a PJ Harvey, de Jaime Gil de Biedma o Corman McCarthy a Nick Cave pasando por Johnny Cash. "Empleamos música de tres fuentes distintas", explica Bieito, "música espectral escandinava (en la línea de grupos como los islandeses Sigurd Rós), música alternativa -una parte de la cual ha sido compuesta originalmente para la ocasión- y Bach". Las músicas se van entrelazando: pop, balada clásica, rock y la Pasión según San Mateo.

Entre los textos, escritos en primera persona sobre el suicidio, testimonios extraídos de Internet de experiencias cercanas a la muerte, poesía sobre la naturaleza autodestructiva del hombre, vivencias de sufrimiento e incluso un trozo de entrevista de Víctor Amela con un médico especialista en ayudar a morir, de la contra de La Vanguardia... El núcleo central, sin embargo, son textos del autor suizo Fritz Zorn de su libro Bajo el signo de Marte (Anagrama), una autobiografía póstuma publicada en 1977, un año después de morir de cáncer.

El espectáculo, en danés e inglés (con sobretitulado), se representa ante una pared de altavoces que sugiere, según sus creadores, el Muro de las Lamentaciones, y que es capaz de reproducir una selección de "los murmullos doloridos de la humanidad". Voices es una coproducción del Betty Nansen Teatret de Copenhague y el Festival Internacional de Bergen (Noruega). Los intérpretes son miembros de la prestigiosa compañía danesa, "unos actores excepcionales", recalca Bieito, "de uno de los grupos punteros de Escandinavia y que hicieron el Woyzec de Tom Waits y Robert Wilson". Junto a ellos actúan estrellas del pop nórdico y con sus conmovedoras y puras voces 16 niñas del Cor Vivaldi-Petits Cantors de Catalunya.

¿Hay parte de experiencia personal de Bieito en este oratorio? "Mucho, entre otras cosas, he hecho un oratorio de corte convencional, de Haendel, en Stuttgart. También estuve a punto de morir ahogado, hace muchos años, en un río, arrastrado por la corriente. Y siempre están el dolor y la tristeza de las pérdidas. Y la belleza. Aunque no soy creyente, entiendo, al escuchar sus maravillosas voces, la expresión cristiana de que los niños son prueba de la existencia de Dios".