Gómez logra más votos que Lissavetzky en la capital
El descalabro electoral de Miguel Sebastián en las municipales de 2007 palidece al lado de los resultados de Jaime Lissavetzky. El ex secretario de Estado para el Deporte ha perdido más de 120.000 votos socialistas en la capital -los mismos que se ha dejado su contrincante popular, Alberto Ruiz-Gallardón-. Sebastián convenció al 31% de los votantes; Lissavetzky, al 24%. Sus resultados, además, son peores que los obtenidos por Tomás Gómez en la capital. El secretario general del PSM ha arañado el 24,8% de los votos de la ciudad para la Asamblea. En cifras absolutas, Gómez ha ganado a Lissavetzky por 11.524 votos en Madrid capital.
El descalabro de Sebastián se saldó con su renuncia. Ni siquiera llegó a tomar posesión del acta de concejal. No pisó el salón de plenos. La dirección federal le había advertido de que muchos de sus compañeros pedían su dimisión. Cuatro años antes Trinidad Jiménez, que como Sebastián fue una apuesta personal de José Luis Rodríguez Zapatero, permaneció tres años como portavoz en la oposición y luego se marchó como secretaria de Estado para Latinoamérica. Lissavetzky lleva toda la campaña repitiendo que no piensa emular a sus antecesores. Asegura que Madrid es su "destino final político" y el domingo, cuando salió al estrado para valorar los resultados -los calificó de "decepción"-, insistió en que ahora lo que toca es trabajar.
Ediles 'impuestos'
No falta quien asegura que no va a tener fácil gestionar a su grupo municipal. De los 15 concejales que ha obtenido (tres menos de los que se consiguieron en 2007), 10 se los impuso Tomás Gómez desde la ejecutiva cuando se elaboró la lista. Una candidatura que costó acusaciones cruzadas y un tira y afloja muy polémico porque trascendió a los medios de comunicación. Lissavetzky no quiso conformarse con una lista en la que no había decidido prácticamente ningún nombre y plantó cara. Finalmente, se llegó a un acuerdo cuando consiguió incluir a dos personas de perfil técnico, la editora Ana García D?Atri en el número 8 y al arquitecto Luis Moya en el 19. Solo ella será concejal.
En la elaboración de la lista para la capital pesaron, y mucho, las primarias de octubre pasado. La ejecutiva de Gómez eliminó a los ediles que se habían posicionado a favor de Trinidad Jiménez (Óscar Iglesias, Pedro Santín, Ángeles Álvarez, Daniel Viondi, Almudena Fernández y Ramón Silva) y mantuvo a los que le habían sido leales. Ahora Lissavetzky tiene que liderar un grupo que no ha elegido pero con el que tendrá que hacer oposición los próximos cuatro años.
