La protesta se planta en el 22-M
Miles de indignados mantienen las concentraciones pese a la prohibición - El Movimiento 15-M se extiende a varias capitales de comarca
Cada día llegan más indignados que el día anterior al epicentro del Movimiento 15-M en Valencia. Es la plaza del Ayuntamiento, rebautizada el viernes como plaza del Quinze de Maig por los jóvenes. Y ayer, siendo además sábado y pese a la prohibición de la Junta Central Electoral por ser día de reflexión, no fue una excepción. Los algo más de 4.000 metros cuadrados de la isleta central de la plaza se quedaron pequeños para acoger a las miles de personas que se concentraron coreando consignas como "Reflexión, inflexión" o "Los banqueros, usureros". Tanta gente acudió que la Policía Local cortó finalmente el tráfico. La organización espera hoy todavía a más gente.
La mañana resultó algo más festiva de lo habitual. El buen tiempo y las ganas de gritar hicieron de la concentración una atracción permanente. A eso de las 12.00, cientos de personas formaron una cadena humana en torno al edificio consistorial y la Policía Local no tuvo más remedio que cortar el tráfico. Era la primera vez que lo hacía en el día y no sería la última. Los indignados corearon decenas de lemas, desde el manido "el pueblo unido, jamás será vencido", al socarrón, "Ayuntamiento, miento, miento, miento".
En Valencia, la policía cortó el tráfico por la enorme multitud
Mientras tanto, la plaza bullía de vida. Las diferentes comisiones surgidas en torno a la asamblea han generado decenas de actividades. De hecho, los coordinadores ya han colocado mapas en puntos estratégicos para que la gente sepa dónde se hace lo que se hace allí. Si se mira al Ayuntamiento de frente, a la izquierda queda la ludoteca con su pequeña biblioteca y el tapete de juegos infantiles. La comisión de Creatividad ha dispuesto un colchón sobre el tapete para que los bebés no puedan lastimarse. Cada vez hay más niños y hay que tener cuidado. Creatividad organiza, además, recitales de poesía, o talleres de malabares.
Algo más a la derecha, aparecen los plásticos del campamento base. El interior es un laberinto de bancadas, ordenadores, panfletos y cocineros improvisados. Más a la derecha figura el gabinete de Prensa y Comunicación, un hervidero de ideas, redes sociales y fotocopias varias. En la práctica, se trata de una pequeña ciudad. Sus funcionarios voluntarios llevan escrito el nombre en retazos de papel sobre la camiseta. Los encargados de las comisiones portan, además, chalecos amarillos, aunque es complicado encontrar a los mismos por la mañana y por la tarde. Carlos Molina, de los que más tiempo lleva en la acampada, calculaba ayer que la organización cuenta normalmente con unos 400 voluntarios. Gente como Luz, una señora de 71 años que ayer descansaba a su lado, o Manu, un chaval espigado al que ayer se le veía algo preocupado por los gritos a Canal 9.
Es el Movimiento 15-M, el que empezó con 12 personas la noche del lunes y continúa con varios miles el domingo de elecciones. Ayer no celebraron asamblea por respeto a la jornada de reflexión (ellos la llaman Jornada d'inflexió) y hoy tampoco parece que vaya a celebrarse. Sí que surgen grupos espontáneos que establecen debates. El que quiere coge el megáfono y se explica lo mejor que puede sobre la situación que viven.Además de la plaza del Ayuntamiento de Valencia, la plaza de la Montañeta de Alicante, base local de la protesta del Movimiento 15-M, también era a primeras horas de la noche de ayer un hervidero de personas deseosas de expresar su solidaridad con los acampados.
En todo momento, los concentrados (un millar al cierre de esta edición) se mostraron respetuosas con la filosofía de la jornada de ayer, reflexionar en la antesala de la votación de hoy. La organización, que ha decidido canalizar el impulso inicial de Democracia Real, a través de la plataforma digital www.tomalaplaza.net, celebró sobre las 20 horas una asamblea informativa. "Vamos a hacer un balance de lo realizado hasta ahora, y a pedir respeto por la jornada de reflexión y por supuesto por la votación de mañana [hoy para el lector]", dijo un portavoz. "Y mientras, los diferentes grupos de trabajo seguirán estudiando y debatiendo sus propuestas", añadió.
El movimiento del 15-M también se ha extendido a otras localidades de la provincia de Alicante, entre ellas Benidorm, Elche y Alcoi.
Amenaza de multa
En esta última localidad, los concentrados optaron la noche del viernes por desconvocar el acto ante la amenaza de la policía de ser multados con 6.000 euros. Según un comunicado de los representantes del colectivo, sobre las 00.30 horas acudió a la plaza de España una dotación de la Policía Nacional advirtiéndoles de que no podían acampar. Ayer, más de un centenar de personas se congregaron sin incidentes en la misma plaza.
En Castellón, había durante las últimas horas de la tarde más manifestantes en la plaza María Agustina que jóvenes tomando cañas en la zona de Las Tascas, el lugar habitual de reunión para tapear los sábados. A partir de las ocho y media sobrepasaban con mucho el millar de personas de todas las edades y distintos puntos geográficos. Entre ellos estaba Eva, una gallega de 22 años que lleva acampada en la plaza desde el miércoles. "Vamos a seguir aquí hasta que cambiemos este sistema injusto", aseguró mientras asentían los miembros de la organización.
La solicitud de una democracia real, que paguen la crisis sus responsables y las alusiones a la corrupción fueron las reclamaciones más recurrentes durante el día de ayer, en el que se organizaron talleres de elaboración de camisetas, collages, y actividades para los niños.
Información elaborada por Pablo Ferri, Miguel ángel Campos, Santiago Navarro y Jaime Prats.
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