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Reportaje:Elecciones municipales y autonómicas

Tomás Gómez, socialdemócrata

El líder del PSM intenta situar el debate electoral en el plano ideológico y centrarlo en la gestión de los servicios públicos como gran valor de su partido

Tomás Gómez tiene una idea fuerza. Un eje sobre el que le gustaría que rotase la campaña electoral. Una coordenada que, calcula, es la única que le puede hacer invertir el pésimo panorama que le muestran las encuestas. Gómez, candidato socialista a presidir la Comunidad, quiere que el debate se centre entre dos modelos ideológicos. Por un lado, el "socialismo democrático y el estado del bienestar", que es el suyo; del otro, el liberalismo "de la derecha más rancia y radical de Europa", que es el que representa la candidata del PP, Esperanza Aguirre. Ayer en un centro social de Orcasitas, junto al candidato a la alcaldía de Madrid, Jaime Lissavetzky y el ministro de Presidencia, Ramón Jáuregui, insistió en ese discurso. "En la gestión de los servicios públicos es en lo que la gente nos puede percibir como mejores y más de fiar que los populares", es la reflexión.

El candidato aspira a "arañar" al PP tres décimas cada día de la campaña

Ante algo más de un centenar de personas en el distrito de Usera, Gómez inauguró el muestrario de mensajes que pretende que queden claros a lo largo de la próxima quincena, en la que aspira a rebajar décima a décima la ventaja de Aguirre. Es literal. La cuenta es la siguiente: el PP está a cuatro puntos de perder la mayoría absoluta. Si se le "arañan" tres décimas al día, los socialistas pueden ganar. Con la participación de IU, le faltó añadir.

Entre esos mensajes uno parece destinado a ser la estrella de la campaña: el PP tiene un programa oculto, que no se atreve a exponer ante los ciudadanos. Y ese programa ahondaría en las diferencias entre los madrileños. Si con la privatización del Canal y de Telemadrid han mostrado qué proyecto tienen para Madrid, con el copago sanitario llegaría una segunda fase, aún más temible, vino a decir.

Los asistentes al mitin, casi todos ellos de más que mediana edad, aplaudían con un entusiasmo comedido. Un joven pretendió colarse entre el auditorio. El chico argumentó que tenía "curiosidad por las ideas de los socialistas". Era un joven con una historia triste, lleva más de año y medio en paro. E insistía en hablar con Gómez poco antes de la intervención del socialista. Gómez lo acompañó a un despacho de otra planta del centro y allí escuchó directamente sus lamentos y su historia. "Muy Tomás", fue el diagnóstico de sus colaboradores más cercanos. El chico se marchó poco después y se quedó sin escuchar los ejemplos, cuya propia peripecia había inspirado, sobre los problemas de la vida cotidiana de los madrileños y su choque "con el deterioro de los servicios públicos de Madrid". Porque el PP, insistió, ve el estado del bienestar "como un negocio".

Algunos socialistas recuerdan que la estrategia de Gómez se asemeja bastante a la de su antecesor Rafael Simancas. Un plan que busca "fidelizar y movilizar al electorado de izquierdas para al menos no perder los propios apoyos".

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Después de dos mítines, el de apertura de campaña y el de ayer en Usera, parece claro que la contraposición entre el ellos y el nosotros va a planear sobre el resto de la campaña. Los "nuestros" son los que lo están pasando mal, repitió varias veces Gómez. "Si no ganamos nosotros, ¿quién va a defender a los nuestros?". Pero el candidato quiso dejar claro que su proyecto también va dirigido a "los otros", a los de derechas. Porque ellos también necesitan becas, sanidad de calidad, una ley de dependencia para atender a sus familiares. Y a ellos.

Hay otra idea que los líderes socialistas van a enarbolar en todos sus actos públicos hasta el 22 de mayo. Una que va más allá de posturas ideológicas. Que socialistas y populares no son iguales, ni en lo que defienden ni en lo que son.

El candidato municipal, Jaime Lissavetzky, intenta así alejarse de la imagen megalómana de su rival Ruiz-Gallardón e incide en la proximidad y en sus similitudes con el ciudadano medio. Una de las cosas que ayer dejó claras es que en caso de ganar la alcaldía volvería a situar el Ayuntamiento en la plaza de la Villa, en lugar de "en esos lujosos despachos del palacio que se han hecho". También recalcó el "maltrato" que a su juicio reserva el PP a los distritos del sur y el este de la ciudad, entre los que se cuenta Usera.

Las frases

TOMÁS GÓMEZ:

- "En Madrid tenemos la derecha más radical y más rancia de toda España"

- "En el Partido Popular ven el Estado de bienestar como un negocio"

- "Nuestro proyecto es el de la mayoría, el de la gente que hace funcionar Madrid. ¿No va siendo hora de que esa mayoría ocupe el poder político para resolver los problemas de la mayoría de los madrileños?"

JAIME LISSAVETZKY:

- "Vivir en Usera significa que, como ser humano, tienes derecho a disponer de unos servicios públicos"

- "Creemos en lo público como garantía de igualdad. Allá donde alguien sufra tiene que haber un socialista"

- "El que no vota no tiene voz. No valen las lamentaciones el día después"

- "Mi objetivo es convertir a Madrid en referente del bienestar colectivo"

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