El tsunami japonés se deja notar en el Salón del Automóvil

La crisis se notará también en el Salón del Automóvil en su cita bienal en Barcelona, que tendrá lugar entre el 14 y el 22 de mayo. La feria, ya mermada en las últimas ediciones -la de 2009 la salvaron un grupo de patrocinadores e incentivos fiscales para los expositores- empieza el próximo sábado para el público con la novedad de un pabellón exclusivamente dedicado al vehículo eléctrico y 35 marcas, frente a las 55 y 43 marcas de las dos ediciones anteriores. Este dato, en parte, debe achacarse al tsunami de Japón, responsable de que cinco firmas que pensaban acudir no lo puedan hacer.

Honda, Suzuki, Subaru y Lexus no estarán presentes en el Salón. Mitsubishi solo acudirá al pabellón de vehículos eléctricos. "Hemos mantenido conversaciones hasta el último momento, ya tenían espacio adjudicado, pero no ha podido ser", relató el miembro del comité ejecutivo de Fira de Barcelona, Ricard Zapatero, ayer durante la presentación del salón. No son las únicas bajas significativas: Citroën también estará solo presente con un vehículo eléctrico, y Opel, "por razones presupuestarias" de la firma, no tendrá representación.

El presidente del Salón, Enric Lacalle, reconoció que el camino "no ha sido fácil". Ayer mismo se supo que las ventas de coches llevan 10 meses consecutivos cayendo, desde que en julio del año pasado finalizaron las ayudas del plan 2000 E. Las matriculaciones bajaron en abril el 29% en Cataluña respecto al mismo mes de 2010, hasta las 71.808, según informaron las asociaciones de fabricantes ANFAC y de vendedores Ganvam. En tono casi épico habló de "días difíciles en los que me ha estimulado la fe de propios y ajenos", auguró que el salón contribuirá a mejorar las ventas y celebró, interpretándolo como espaldarazo, que la cita coincida en su segundo fin de semana con el Gran Premio de España de Fórmula 1. "Es un acontecimiento excepcional que demuestra que somos invencibles", subrayó. Aseguró que el público familiar es la gran baza de un encuentro que "anima, calienta las ventas". Con todo, evitó cuantificar cuántos visitantes o ventas se cerrarán.

Lacalle relativizó el conflicto que en las últimas semanas ha enfrentado a fabricantes y concesionarios a propósito de la Ley de Economía Sostenible que preveía que estos pudieran devolver a las firmas los coches que no vendieran. La polémica, que cambiaba las reglas de juego entre los dos colectivos, ambos presentes en el salón, (y provocó que la patronal de fabricantes, ANFAC, desenterrara el hacha de guerra), estalló en la cara del Gobierno catalán, ya que CiU votó a favor en el Congreso. Pero, finalmente, la Generalitat dio marcha atrás y apostó por una nueva ley comercial que deje sin efecto la aprobada inicialmente. Además, la Comisión Nacional de Competencia emitió un duro informe sobre la enmienda, que CiU pactó con el PNV y el PP.

Respecto al pabellón dedicado al vehículo eléctrico, Lacalle afirmó, literalmente, que es "lo que toca". "Lo estamos viendo en todos los salones que visitamos, el interés que suscita". En el área dedicada a estos coches, además de modelos de Citroën, Mercedes, Mitsubishi, Nissan, Reva, Smart, Seat, Volvo y un modelo híbrido de Toyota, habrá empresas tecnológicas de este ámbito y áreas destinadas a la divulgación. También se expondrá el primer vehículo que superó los 100 kilómetros por hora propulsado por dos motores eléctricos: el Jamais Contente, que condujo en 1899 el belga Camile Jentazy.