_
_
_
_
Crítica:FERIA DE ABRIL | EL VENTORRILLO / EL JULI, PERERA, LUQUE | La lidia
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Puñetera realidad

Antonio Lorca

Decididamente, la realidad es molesta y fastidiosa. Tras el paréntesis del rejoneo suspendido por la lluvia, permanece en el corazón la felicidad disfrutada en la tarde ya inolvidable del toro Arrojado, que volvió a la vida, y del artista Manzanares, que subió a los cielos. Y mientras duele la piedra por el aburrimiento, el vecino mira con cara de congoja y comenta: "No me diga usted que lo del sábado fue solo un sueño".

No. No fue un sueño, sino un milagro verdadero; de esos que elevan a las alturas a un toro y a un torero, y nos transporta a los demás a un estado de gloria que no necesitamos comprender. Fue un milagro porque existe la magia mientras persista la ilusión. Y un día, inesperado siempre, surge la chispa y brota esa llamarada que parece un sueño eterno.

EL VENTORRILLO / EL JULI, PERERA, LUQUE

Toros de El Ventorrillo, bien presentados, mansos, descastados

y deslucidos.

El Juli: media trasera y ladeada (silencio); media estocada (ovación).

Miguel Angel Perera: dos pinchazos -aviso- y casi entera (silencio); casi entera caída (silencio).

Daniel Luque: cinco pinchazos

y un bajonazo (silencio); estocada (silencio)

Plaza de La Maestranza. Lunes, 2 de mayo. Novena corrida de feria. Lleno.

Pero está visto que el vuelo idílico del pasado sábado no fue más que una luz en la espesura, porque, ayer, la realidad se volvió a mostrar puñetera.

Se lidió una de las corridas triunfadoras del año anterior, y fracasó con estrépito. Se esperaba que El Juli llegara a revientacalderas y las adversas circunstancias le aplacaron el ánimo; y se mantenía la esperanza de que Perera y Luque se sacaran la espina de la feria pasada, y no fue así.

La corrida no colaboró, es verdad. Los toros eran pura basura de la modernidad: mansos de solemnidad, sosos, cobardes, rajados todos y muy blandos. Imposible, quizá, sacar de donde no había.

Mal trago para El Juli, que salió el viernes a hombros como triunfador de la feria y volvía ayer como segundón después del aldabonazo de Manzanares. Intentó remontar la situación, pero la mala condición de su primero no se lo permitió; y solo su enorme capacidad lidiadora posibilitó que obligara al rajado cuarto en un par de tandas por naturales que fueron flor de un instante porque el animal cogió el camino y se refugió en toriles. Quedó, no obstante, la solvencia del torero, que se lució, además, en un quite por ceñidas chicuelinas en su primero, y recibió al otro con cuatro verónicas y una media muy bien trazadas. La revancha queda, pues, aplazada.

También quedó claro que Daniel Luque encierra un misterio. Después de demostrar una valentía incuestionable ante el deslucido y sosísimo tercero, al que veroniqueó con soltura, y Benito Quinta picó con mucha solvencia, se puso a dar pinchazos como un vulgarísimo pinchaúvas y terminó con un bajonazo infamante en los mismos costillares. Feo e imperdonable. Contra toda lógica, brindó al público el muy inválido sexto, al que arrancó un par de naturales, y cuando volvió a colocarse lo hizo siempre despegado y fuera cacho.

Y Miguel Ángel Perera, ni misterio ni nada que se le parezca: dos toros inservibles, un lote infumable, que permitió, eso sí, el lucimiento de sus banderilleros. Juan Sierra, en el segundo, y Joselito Gutiérrez, en el quinto, dejaron alto el pabellón. Pero el maestro salió cabizbajo; nada le salió a derechas, y, cuando iniciaba el cite, siempre con ventaja y alejado del toro. Puñetera realidad...

El Juli, con su primer toro de la tarde, ayer en Sevilla.
El Juli, con su primer toro de la tarde, ayer en Sevilla.GARCÍA CORDERO
El mal juego de los toros impidió la triunfal confirmación de El Juli tras sus éxitos anteriores; sus compañeros de terna, Miguel Angel Perera y Daniel Luque, pasaron desapercibidos. <a href="http://www.elpais.com/toros/feria-de-abril/"><b>Vídeos de la Feria de Abril</b></a>

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Antonio Lorca
Es colaborador taurino de EL PAÍS desde 1992. Nació en Sevilla y estudió Ciencias de la Información en Madrid. Ha trabajado en 'El Correo de Andalucía' y en la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA). Ha publicado dos libros sobre los diestros Pepe Luis Vargas y Pepe Luis Vázquez.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_