Prieto avisa sobre un pacto con el PP en Álava que "nadie respeta" la lista más votada
"Si una sociedad no castiga la corrupción es que está enferma", dice sobre el PNV
Tras llevar meses en sordina, a medida que se acerque la cita con las urnas del 22-M la cuestión pendiente de Álava va a ir resucitando en las relaciones entre socialistas y populares. Ambas partes intentan evitar nuevas fricciones públicas que puedan afectar a su pacto, tras haber salvado la seria crisis que la semana pasada abrió una propuesta parlamentaria del PSE sobre Sortu, pero el conflicto abierto en julio de 2009 cuando el PSE bloqueó la moción de censura que los populares querían presentar contra Xabier Agirre sigue latente. Y la campaña y las elecciones solo van a reactivarlo.
Txarli Prieto, líder del PSE alavés y su candidato a diputado general, está en pleno centro de este debate. Ayer, aprovechó su presencia en un desayuno en Bilbao del Fórum Europa-Tribuna Euskadi, rodeado de varios consejeros del Gobierno vasco, para evitar comprometerse a apoyar a los populares en caso de que sean la lista más votada en las forales alavesas. Con el lehendakari, Patxi López, quien le había presentado como el "futuro diputado general" alavés, a su lado y su rival popular Javier de Andrés a apenas cinco metros, Prieto enfatizó: "Nadie respeta la lista más votada".
Patxi López lo presenta como el futuro diputado general alavés
El candidato socialista recordó que en diversos Ayuntamientos y Diputaciones (son los casos de Álava y Guipúzcoa) no gobierna actualmente quien ganó en las urnas, pues si estas no resuelven lo hacen los pactos. Por segunda vez en 24 horas, desligó el acuerdo por el que el PP sostiene a López, que instó a mantener hasta el final de la legislatura, de la política alavesa. Antes, esbozó en su discurso seis compromisos equiparables al esqueleto de un programa de gobierno. En el tercero de ellos destacó que "las elecciones forales no son rehenes de acuerdos hechos en otros ámbitos".
De Andrés comentó posteriormente a EL PAÍS que el discurso de Prieto le había resultado "predecible". Los populares alaveses nunca han visto con buenos ojos al líder socialista por su proximidad evidente con el PNV y, sobre todo, por su crítica visión de la derecha desde su reconocido ideario de izquierdas. Sus disputas sobre el control interno de Caja Vital serán difíciles de olvidar por ambas partes.
Con todo, miembros de la ejecutiva vasca del PP repiten públicamente lo habitual en estas fechas -hay que esperar a conocer el resultado de las urnas y luego se hablará de pactos-, pero en privado reconocen que Álava sigue siendo un capítulo "esencial". "Si somos la lista más votada no nos cabe ninguna otra posibilidad que no sea la de gobernar", repiten estas fuentes, aludiendo no solo a ese territorio, sino a las demás instituciones en juego.
Prieto también se acordó de otro rival tan directo como el PNV y puso el dedo en la llaga sobre los supuestos casos de corrupción y espionaje descubiertos en Álava. A su entender, si una sociedad no es capaz de castigar a un partido ligado a esos delitos, "es que está enferma". En su opinión, el PNV ha sido víctima de sus pugnas internas en el caso de las cajas vascas y asiste en un "sinvivir" a la repercusión electoral de una presencia en las urnas de la izquierda abertzale.
Horas antes de que el Supremo resolviese ilegalizar Sortu,Prieto rechazó que "una contaminación puntual" en las listas de partidos democráticos para el 22-M, en referencia a la posibilidad de que EA acoja en sus candidaturas a miembros de la izquierda abertzale, pueda acarrear su ilegalización.
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