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La Generalitat logra comprar la Virgen de Bellpuig por 130.000 euros

La venta se produce tras paralizar Cultura su subasta en mayo, anunciar que la había comprado y que la iba a depositar en el Museo de Lleida

Al final pudo ser y la Generalitat adquirió ayer la Virgen de Bellpuig de les Avellanes (La Noguera) tras ejercer el derecho de tanteo y pagar los 130.000 euros con los que se remató su subasta en Barcelona. En la segunda jornada de la subasta de marzo de Balclis la protagonista fue esta obra del siglo XIV de Bartomeu de Robió. Por eso, la excepcional imagen de la virgen gótica (declarada Bien de Interés Cultural en 1991), con su metro de estatura y su rico tocado presidió toda la subasta situada a la derecha del atril donde Tatxu Climent, el director de la sala, marcaba el ritmo de las pujas con su mazo.

"Lote 673. Finalmente podemos subastar la imagen de la virgen de Bellpuig. Cubierto el precio de salida de 120.000 al teléfono. Alguien da más", dijo Climent señalando la imagen que parecía observarlo de reojo. Tras unos momentos de titubeo, alguien, desde el fondo de la sala levantó la mano y subió el precio 10.000 euros más, provocando que todo el público que llenaba la sala se girara para encontrar al valiente. "130.000 euros, alguien da más", dijo varias veces Climent. Al final, cuando parecía que la virgen se iría a casa del osado, la emisaria de la administración levantó su brazo ejerciendo el derecho de tanteo que le concede la ley. "El Estado ejerce su derecho a tanteo, y se le adjudica por un valor de 130.000 euros", dijo Climent, dando por acabado el proceso.

Hace diez meses, el departamento que presidía Tresserras paralizó la primera subasta alegando que no habían sido informados de la venta. "Nos hemos enterado por el catálogo" dijeron. Al mes siguiente el consejero se fotografió con una fotografía de la talla y el presidente de la Diputación de Lleida afirmando que la virgen sería depositada en el Museo de Lleida. Pero en realidad la talla no ha salido de la sala de subasta hasta ayer, porque sus propietarios alegaron que la Generalitat no podía quedarse con ella si la subasta no se había producido.

Que la Generalitat había adquirido la imagen estaba claro, porque junto a la encargada de la administración estaba sentado un alto cargo de la consejería de Cultura. Dos horas más tarde, el departamento de Mascarell emitió una nota en la que confirmaba la adquisición y su intención de acabar depositando la virgen en el Museo de Lleida "por la importante colección de escultura que posee, así como la calidad de la obra". La Generalitat precisaba que para poder ser efectiva la entrega "hace falta un informe premio de la comisión ejecutiva de la junta de Museos de Cataluña".

Con la compra de ayer y su depósito en Lleida se pone fin a los numerosos traslados que ha protagonizado esta imagen a lo largo de su historia. Creada para la sala capitular del Monasterio de Bellpuig de les Avellanes fue adquirida en 1894 por el banquero leridano Agustí Santesmases, que más tarde la vendió al coleccionista americano, que la trasladó a su palacio de Sitges, (actual Maricel). Uno de sus herederos que la había llevado al castillo de Tamarit, en Tarragona, subastó la colección en 1986 excepto la virgen que la entregó a la hija de su hombre de confianza en Tarragona, Josep Vilar. Hace unos meses, sus descendientes decidieron venderla al mejor postor.

La Virgen de Bellpuig de les Avellanes, del siglo XIV, adquirida por la Generalitat en una subasta en Barcelona
La Virgen de Bellpuig de les Avellanes, del siglo XIV, adquirida por la Generalitat en una subasta en Barcelona

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