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Reportaje:

Un 75% de acción, un 25% de descripción

Chufo Lloréns aplica de nuevo su fórmula narrativa en 'Mar de fuego', continuación de su 'best seller' histórico 'Te daré la Tierra'

Tres hermanos que luchan por la herencia del condado de Barcelona. Conflictos entre cristianos, judíos y musulmanes y sectas religiosas, prostíbulos, sacerdotes indisciplinados, venganzas e historias de amor entre nobles y plebeyos. Todo ello en la bulliciosa Barcelona del siglo XI, ciudad en crecimiento, de unos 2.500 habitantes, que comenzaban a construir enclaves extramuros. Todo eso tiene la nueva novela de Chufo Lloréns, Mar de fuego (Grijalbo), continuación de la exitosa Te daré la Tierra.

La receta, según el autor, es sencilla: "Intento dar pena al lector al final de cada capítulo. Mi intención es dividir la obra en capítulos cortos que culminen con una alta intensidad narrativa para incitar al lector a continuar leyendo".

"Escribo como leo: si a las 50 páginas una novela no me interesa, la dejo"

El escritor, tras tres años de trabajo, vuelve a exprimir el siglo XI barcelonés que tanto éxito le dio en la primera narración de las andanzas del prohombre Martí Barbany. Ahora, Barbany cede el protagonismo a su hija Marta, joven inquieta y delicada que conocerá el amor en el palacio de la condesa Almodis de la Marca.

"El siglo XI es, per se, una novela. En el proceso de documentación de Te daré la Tierra, recopilé mucho material que no podía dejar en el tintero", confiesa el autor. "Descubrí anécdotas tan extraordinarias que, sin añadirles nada, captan la atención del espectador". Sin embargo, pese al arduo proceso de recopilación de información y la traducción de textos históricos, Lloréns hace cohabitar la realidad y la ficción para construir el edificio final de la novela. "Siempre empiezo a escribir a partir de una anécdota curiosa que ocurrió en la vida real para, a partir de ahí, tirar del hilo y dar cuerpo al texto".

La documentación, la riqueza léxica y la precisión de cirujano en la descripción de un palacio o de una embarcación son dignas de mención. Al respecto, el otrora empresario artístico y propietario de la sala de fiestas Don Chufo, afirma: "el proceso de cocción de la novela, la documentación y la búsqueda de datos, mapas o textos me hace disfrutar más que durante la propia escritura".

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En Mar de fuego, cuyo espacio temporal se sitúa 10 años después del final de su anterior trabajo, los protagonistas principales son los hijos de los personajes de Te daré la Tierra, que se tradujo a 12 idiomas. Es en ese contexto en el que el escritor construye su historia, que le gustaría haber leído: "Cada vez que escribo asumo un reto: me gusta escribir como me gusta leer. Si a las 50 páginas una novela no me interesa, la dejo".

La fórmula del éxito en la literatura de Lloréns es, incluso, cuantificable. La novela perfecta debería contener el 75% de acción y el 25% de descripción. "No podemos estar tres páginas para describir una puesta de sol", ironiza. Y de eso, sabe.

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