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Entrevista:JUAN CARLOS IZPISÚA | Investigador

"No todo son ventajas con las células madre embrionarias"

Javier Sampedro

Juan Carlos Izpisúa Belmonte dirige dos laboratorios de investigación en células madre, uno en el Instituto Salk de California -el centro de donde ha salido el trabajo de hoy- y otro en el Centro de Medicina Regenerativa de Barcelona. Su grupo es uno de los más avanzados en el desarrollo de las células iPS, o células de pluripotencia inducida, sobre las que ha publicado varios trabajos de referencia. Ayer asistía a una reunión científica en California que analizaba, justamente, los problemas de reprogramación de las células iPS. Atendió a este diario justo antes de iniciar su conferencia.

Pregunta. ¿Es un revés grave para las células iPS?

Respuesta. No lo creo, lo que estos estudios revelan son las limitaciones de la tecnología actual para generar y mantener células iPS. Estamos usando virus para generarlas, desconocemos todos los factores implicados en el proceso, las células están mucho tiempo en cultivo y sometidas a estrés, etcétera. Son problemas técnicos, pero en absoluto problemas conceptuales que supongan un revés insalvable para su posible uso en medicina regenerativa

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P. ¿Puede haber más problemas imprevistos con las iPS?

R. Posiblemente. Pero esto siempre ocurre en ciencia. A medida que la tecnología avanza, surgen métodos más sofisticados de detección de alteraciones que indican que lo que creíamos que estaba bien en realidad no estaba tan bien. Por ejemplo, estudios que nuestro grupo ha publicado esta semana, y los que publicaremos en las próximas en Nature, demuestran alteraciones no ya epigenéticas, sino mutaciones en los propios genes. No obstante, todas estas alteraciones, tanto genéticas como epigenéticas, eran en cierto modo predecibles, y se deben al escaso conocimiento que todavía tenemos sobre los factores y los mecanismos que definen a una célula pluripotente. Todos estos resultados identifican problemas que, estoy convencido, van a recibir una rápida respuesta de la comunidad científica. No tardaremos mucho en empezar a ver otros trabajos que resuelvan estos mismos escollos.

P. ¿Será necesario volver a dirigir los mayores esfuerzos a las células madre embrionarias?

R. La investigación en células embrionarias y en iPS son investigaciones complementarias. Necesitamos las células madre embrionarias para poder comparar y mejorar las células iPS. También necesitamos las células embrionarias para comparar las consecuencias funcionales de las mutaciones en las iPS. Pero no todo son ventajas con las células madre embrionarias: acumulan mutaciones por su manipulación y cultivo. Y tienen inconvenientes respecto a las iPS, ya que, a diferencia de estas, son inmunológicamente incompatibles con el paciente, y suscitan controversias éticas. Las células embrionarias y las reprogramadas tendrán ventajas e inconvenientes. Estudiarlas en paralelo es lo mejor para dominar su uso en beneficio de la salud humana.

P. ¿Qué ha ocurrido con el freno judicial del año pasado a la investigación?

R. La justicia sigue su curso y el parón sigue vigente.

Juan Carlos Izpisúa.
Juan Carlos Izpisúa.

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