Agentes de la UIA accedieron al atestado de los arrestos de De Miguel y Tellería

Varios ertzainas de la antigua Unidad de Información y Analisis (UIA) conocidos de los dos ex dirigentes peneuvistas imputados por presunta corrupción y espionaje político, Alfredo de Miguel y Aitor Tellería, accedieron al atestado de las detenciones de ambos, junto a otra serie de personas vinculadas al PNV y acusados de supuesta corrupción, el pasado 17 de marzo. El juez instructor pidió en su momento los datos de todos los integrantes de la UIA en el periodo investigado -primera parte de 2008- para determinar quiénes de ellos pudieron dar información a Tellería.

Uno de los agentes que declaró como testigo admitió aquel extremo, incontrovertible por el rastro que deja ese tipo de intervención en los sistemas informáticos de la Ertzaintza, pero negó haber facilitado a nadie información alguna acerca de las diligencias judiciales que se practicaban.

La secretaria de De Miguel está casada con otro agente citado en el sumario

Aunque no consta en el sumario del caso Tellería, cuyo secreto se levantó recientemente, el PNV hizo en aquellas primeras horas tras las detenciones esfuerzos de todo tipo por conseguir información sobre lo que había motivado la actuación policial y lo que estaba ocurriendo en los juzgados durante la incomunicación de los arrestados. Otro agente de la UIA que consultó los atestados policiales sobre la supuesta trama fue el hermano del presidente del PNV alavés, Iñaki Gerenabarrena.

Un agente conocido como Beñat, quien prestó declaración ante el juez el pasado 19 de noviembre, justificó su consulta del atestado alegando que formaba parte de su rutina de trabajo. Explicó que tiene, o tenía, la costumbre de revisar todas las mañanas todos los atestados que levantan las comisarías de Vitoria, Llodio y Laguardia.

Este ertzaina tuvo que dar explicaciones a sus superiores, que le requirieron un informe detallando las razones por las que se interesó por ese atestado. El agente admitió conocer "de vista" a Alfredo de Miguel ya que ambos tienen una casa en Lanciego. También conocía a Aitor Tellería, agregó.

Pese a ese conocimiento previo, sostuvo que fue al acceder al atestado cuando tuvo noticia de las detenciones y de la identidad de los arrestados.

El revuelo que originó la operación policial removió todos los cimientos del PNV, cuyo presidente, Iñigo Urkullu, se encerró con el responsable de la ejecutiva alavesa, Iñaki Gerenabarrena, en la sede del partido en Vitoria y tocó a rebato para conocer las circunstancias y las motivaciones de los arrestos.

El citado ertzaina entró en la UIA (hoy División Antiterrorista) en 2001, dentro del Grupo de Información, del que era jefe uno de los dos imputados por revelación de secretos e infidelidad en la custodia de documentos: Jesús Acha.

Como otros declarantes, empezando por el propio Tellería, este agente negó conocer como "Karlitos" a Carlos Lau, el otro agente imputado. Bajo aquel nombre se realizó la mayoría de las fichas informativas sobre personalidades alavesas halladas en el ordenador de Aitor Tellería.

Otro de los agentes cuyo nombre figura en el sumario del caso es el marido de la secretaria de Alfredo de Miguel cuando era diputado foral, mantenida por su sucesor, Iñaki Nafarrate. En el sumario constan contactos telefónicos entre ese ertzaina, a cuya esposa se atribuye un intercambio frecuente de correos electrónicos con Tellería, y los dos agentes imputados. Se produjeron durante las fechas que rondan la creación de los seis documentos de ordenador encontrados en poder de Tellería y en torno a las que también se produjo el intercambio más intenso entre este y los dos ertzainas imputados.