"El plantón de los peneuvistas ha sido una cortina de humo"

Aitor Abecia fue elegido alcalde de Zambrana en 2007 como representante de la Agrupación Independiente de Zambrana. Este municipio de 406 habitantes, a 20 minutos en coche de Vitoria en una zona natural privilegiada donde conviven llanura y montaña, ha visto su nombre vinculado a la supuesta trama corrupta del caso De Miguel.

Pregunta. ¿Cómo surge la agrupación que le llevó al Ayuntamiento?

Respuesta. Pertenecemos a movimientos ecologistas y en Zambrana se mascaba una macrorrecalificación de suelo con nula transparencia. Había un anteproyecto para instalar allí una central de ciclo combinado que terminó en Lantarón.Creíamos que el proyecto era una aberración medioambiental, porque su extensión superaba de cinco a siete veces la del nucleo urbano de Zambrana, una cosa bestial. Así que nos presentamos a las elecciones sin niguna ambición. Queríamos un concejal para tener información de primera mano y ejercer presión desde dentro. Y la gente, cansada de tanta gestión en la sombra, nos votó en masa.

P. ¿Recibió presiones de la Diputación de Álava, en concreto de Alfredo de Miguel, tras salir elegido?

R. No puedo responder por respeto a la comisión.

P. ¿Qué le ha parecido la decisión del PNV de abandonar la sesión?

R. He visto al portavoz del PNV asumir la figura de un abogado defensor. No he visto al PNV colaborando. Se dirigió a mí en tono jocoso para que no pudiera esclarecer mi posición. Las preguntas no tenían nada que ver con la tramitación. Me mareaban con las fechas. Creo que esto estaba planeado, que era una cortina de humo para que se desdibujara mi comparecencia. Fue surrealista.

P. ¿Cuánto pagó Rieza Urbanizer por las opciones de compra de los terrenos?

R. El triple del valor de mercado. Por ejemplo, en Arasur se pagaron 5,6 euros por metro cuadrado por adquirir las tierras. Y el grupo Riera adelantó hasta tres euros por cada uno del millón y medio de metros cuadrados de Zambrana y los agricultores siguen siendo propietarios de las tierras. Si quieren hacerse con ellos, ahora tendrán que pagar 14 euros por metro.