Imaginación moral
La repugnante agresión al consejero de Cultura de la Comunidad de Murcia tuvo lugar este sábado. Las reacciones, una vez más, se esclavizaban a la oposición política y sindical, con el resabio mitinero de fin de semana. Esa cobardía mafiosa del puño americano, un trío guardándose las espaldas y hasta la frase arrojada para señalar una lógica enferma, merecía mejor respuesta.
La prensa, que casi siempre juzga a los políticos con desmesura, que maneja las filias y las fobias como un sastre la tela y el paño, se escandaliza a menudo por el nivel de crispación social. Aunque muchos vapulean a los responsables políticos como si tan sólo pudieran ser encajadores de improperios, como si en el sueldo, y esta argumentación suele ser muy popular, les viniera incluido el hígado de hierro. A ratos uno se pregunta si estas actitudes, celebradas por los fieles desde las prietas filas que se exigen hoy, se perpetúan porque no sabemos hacerlo de otra manera, porque no queremos o porque se espera obtener beneficios de dejar que las cosas sigan así.
La hermosa lección de pedagogía política que el presidente norteamericano Obama impartió en su discurso en Tucson tras el atentado contra una congresista se recibió con elogios unánimes. El elogio, me temo, es la más sutil de las formas del desprecio. Se elogió tanto como hoy se ignora su exigencia de no malgastar las tragedias en hacer politiquería para ganar puntos, de esa que se olvida al siguiente noticiario.
Ver cómo la lluvia de sus palabras no ha mojado nuestro suelo político ni tan siquiera unos días después, quizá nos obliga a recordar algunas frases: "No podemos ser pasivos ante la violencia pero tampoco podemos usar esta tragedia como otra ocasión más para atacarnos los unos a los otros. Eso no lo podemos hacer. Cada uno de nosotros debe tratar estos asuntos con una buena dosis de humildad. En vez de acusar o culpar, aprovechemos esta ocasión para ampliar nuestra imaginación moral, escucharnos unos a otros más detenidamente, agudizar nuestro instinto de empatía y acordarnos de todas las esperanzas y sueños que tenemos en común".
Aunque es una receta genérica y se puede ver en Youtube, esperemos que pronto esté de venta en farmacias españolas.
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