Tres detenidos por matar a un joven a puñaladas

Qunde Qui, un hombre de 20 años de origen chino, murió en la madrugada de ayer tras ser apuñalado al menos en la espalda y en un glúteo. La víctima fue hallada junto a un conocido karaoke de Parla frecuentado por orientales, lo que hace pensar a los investigadores que el crimen pueda deberse a un ajuste de cuentas por problemas de juego o drogas. La policía detuvo a tres personas de la misma nacionalidad acusadas de ser los autores del crimen, según informó un portavoz de la Jefatura Superior de Policía de Madrid.Los hechos ocurrieron sobre las cuatro de la madrugada de ayer, cuando un comunicante anónimo alertó al 091 de que había una persona en medio de un gran charco de sangre en el kilómetro 5 de la carretera M-408 que une Parla con Pinto. Cuando llegaron, los agentes encontraron a la víctima moribunda con varias puñaladas visibles. Los sanitarios del Summa desplazados al lugar le hicieron las primeras curas y lograron estabilizarle, aunque falleció poco después de llegar al hospital de Getafe. Sufría lesiones muy graves, sobre todo en la espalda, que debieron afectar a órganos vitales.

Las primeras indagaciones policiales condujeron a la detención, horas después, de tres supuestos autores materiales de las puñaladas. La policía no ha facilitado más datos (ni siquiera la edad de los arrestados), ya que las pesquisas continúan abiertas. No se descarta que pueda haber más detenciones en las próximas horas. La titular del juzgado de guardia de Parla ha decretado el secreto de las actuaciones. Dos forenses hicieron ayer la autopsia al cadáver de Qui en el Instituto Anatómico Forense. Nadie se interesó por el cadáver.

Las investigaciones vinculan el crimen a una pelea en la discoteca karaoke El Cielo y el Mundo, en la entrada norte de Parla junto a un hotel y una gasolinera. El lugar, frecuentado por inmigrantes orientales, fue escenario el pasado mes de noviembre de una redada policial que concluyó con 28 personas detenidas acusadas de juego ilegal, prostitución y tráfico de drogas.

La de ayer es la segunda muerte violenta registrada en la región en lo que va de año. La primera fue la de un colombiano hallado muerto con un corte en el cuello el 1 de enero en una cuneta de Loeches.