Ciudad sin crisis por un día

A algunos comerciantes, los Reyes se les antojan algo rácanos este año. Tal vez para compensarlo, les han traído el primer puente del año en pleno arranque de las rebajas. Y con libertad para abrir cada día. Los tenderos respondieron y llenaron la ciudad de carteles de rebajas. La mayoría de los productos costaban entre el 40% y el 50% del precio marcado anteayer, pero no era raro toparse con descuentos de incluso el 70%.

Pese a que la crisis se resiste a remitir, la gente inundó el centro de Barcelona desde buena mañana. Incluso los comerciantes calificaron la jornada de "excepcionalmente buena". La cola frente a los grandes almacenes de El Corte Inglés es ya la anécdota de cada año, pero las colas, sobre todo en las cajas, fueron habituales en multitud de tiendas. A primera hora de la mañana los accesos a los principales centros comerciales se colapsaron. Las caravanas de coches para llegar y salir de La Maquinista de Barcelona duraron todo el día, la circulación fue muy densa en la Ronda Litoral y también se produjeron retenciones en los accesos a La Roca del Vallès -donde está el centro comercial La Roca Village, de productos de fuera de temporada- y a Mataró Park.

Los accesos a los centros comerciales se colapsaron de buena mañana

Los tenderos dicen que el día fue "excepcionalmente bueno"

Cataluña concentra una cuarta parte de las ventas de toda España en rebajas

En Barcelona, además de los comercios, el centro fue un hervidero todo el día, del cual se beneficiaron también los bares y restaurantes del Eixample. Sara Vázquez, de 17 años, iba ayer cargada por el paseo de Gràcia con varias bolsas. Junto con dos amigas, estaba dispuesta a fundirse los 250 euros que ha conseguido reunir a lo largo de la Navidad, regalo de varios familiares. "Hemos estado toda la mañana en el Portal de l'Àngel y en las calles que hay por allí, hemos comido un bocata y ahora vamos a recorrer esta zona", aseguró. La pega de las rebajas: las colas en los probadores y la caja.

En algunos momentos, el Portal de l'Àngel, donde se concentran las tiendas más populares, fue una auténtica ratonera. Tanto que el grupo de hip hop que suele ofrecer su espectáculo en el centro de la vía tenía que retirarse a veces para dejar paso a la gente, ávida de gangas. Como cada año, hubo quien aprovechó para captar la atención de las cámaras, como tres chavales vestidos de boxeadores ante las puertas de El Corte Inglés, y también quienes salieron a denunciar el "consumo masivo y desenfrenado" de Navidad, como unos jóvenes que se pasearon arrastrando una gran caja de pastillas bautizada como Consumina.

4Si de algo ha servido la crisis, ha sido en parte para que los comerciantes agudicen el ingenio al diseñar sus estrategias comerciales. Ayer una de las más sonadas fue la de la firma de moda Desigual. Las 100 primeras personas que entraran en ropa interior en la tienda de la calle de los Arcs podían salir equipadas sin pagar nada. La campaña Entra casi desnudo, sal vestido, se repitió ayer en San Sebastián y Marbella. Antes ya se había realizado en Madrid, Amsterdam y Lisboa.

De cualquier modo, ayer Barcelona no parecía la ciudad que tiene más de 100.000 personas paradas. Por un día. A la afluencia de gente en las tiendas se encomendaban precisamente ayer los comerciantes, que llevan más de dos años viendo como el consumo sigue deprimiéndose. Por primera vez en mucho tiempo, asoma el optimismo. Diciembre fue un mes irregular: el puente de la Constitución fue bueno, pero le siguieron un par de semanas flojas. Los empresarios remontaron en la campaña de Navidad, cuando su facturación creció un 5%. Y ahora llega la época más fuerte, que representa entre el 20% y el 25% del negocio de todo el año, por encima del 15% que supone la época de rebajas estival.

El secretario general de la Confederación Catalana de Comercio (CCC), Miguel Ángel Fraile, calificó el día de ayer de "excepcionalmente bueno". "Estamos muy satisfechos con las ventas de este primer día. Hacía tiempo que no había tanta gente en las tiendas comprando y no solo mirando. Esperamos que mañana también sea un gran día. Las expectativas de venta son muy altas y esperamos que se repita una jornada tan extraordinaria como la de hoy [por ayer]", aseguró en declaraciones a Efe.

La campaña dejará a los comerciantes catalanes unos 1.000 millones de euros, según las previsiones que han realizado los empresarios. Eso supone una cuarta parte de toda la caja que se hará en el conjunto de España, lo cual representa el 6% más que el año pasado, aunque entonces la campaña de rebajas fue bastante floja.

Fraile recordó, además, que hay stock de sobras para despachar, puesto que, salvo los días de Navidad, los ciudadanos no se dieron muchas alegrías a lo largo del año y los comerciantes han ido acumulando existencias. Por ello, los descuentos medios son, según ha sondeado la CCC, de entre el 40% y el 50% sobre el precio que los productos tenían el pasado miércoles.

El secretario general de los comerciantes animó a los ciudadanos a volver a inundar las calles hoy y mañana, aunque recordó que los domingos las tiendas deben competir con otra oferta de ocio, si bien se puede llegar a un público que solo puede salir a comprar ese día festivo.

Fraile calculó que el presupuesto de cada catalán oscila entre 200 y 250 euros. De esta cantidad, la mitad irá a ropa, calzado y complementos, y el resto a equipamientos y productos electrónicos. El gasto, asimismo, varía por comunidades autónomas. Las más derrochadoras, según las asociaciones de consumidores, son Madrid y Cataluña.