_
_
_
_
_

Industria media entre los sindicatos y Nissan para salvar el nuevo modelo

UGT y USOC llevarán el viernes una propuesta para optar a la furgoneta

Lluís Pellicer

Una inversión de 80 millones y la garantía de mantener 1.300 puestos de trabajo durante 10 años no llega cada día. Y menos en los tiempos de corren. Así que el Ministerio de Industria ha empleado esta semana para mediar entre la dirección de Nissan y los sindicatos UGT, CC OO y USOC para que estos acuerden las condiciones que debe asumir la plantilla de Barcelona para optar a adjudicaciones como la de la camioneta pick up o el modelo eléctrico NV200. Según explicaron varias fuentes de esta mesa, el Ejecutivo central puso a disposición de la dirección de Nissan ayudas para los nuevos modelos. Según el ministerio, se trata de préstamos preferentes para la competitividad de la planta desvinculados de la producción, puesto que estos no están permitidos por la Comisión Europea.

La camioneta que quiere Barcelona se adjudicará la semana que viene
Más información
Los trabajadores de Nissan rebajan sus condiciones laborales para pelear por la furgoneta 'pick up'

El pasado 2 de diciembre la planta barcelonesa de Nissan perdió formalmente la producción del modelo pick up para Europa después de que los sindicatos rechazaran las contrapartidas que les requería la dirección: congelación salarial durante tres años, ampliar las jornadas laborales y renunciar a la antigüedad, entre otras. El comité de inversiones de Nissan, reunido en Japón, rechazó fabricar en la capital catalana, pero no eligió una alternativa.

La planta que producirá la pick up se decidirá la semana que viene, entre los días 12 y 13 de enero. Un portavoz de la empresa insistió ayer en que Barcelona ya no puede optar a ella. "Está descartada y se la llevará otro centro", insistió. Y agregó que en las reuniones en el Ministerio de Industria, que preside el director general, Jesús Candil, se intenta hallar fórmulas para que "Barcelona vuelva a ser competitiva" cuando se produzca la adjudicación de la NV200, a la que también aspira la ciudad y que debe realizarse en breve.

Sin embargo, los sindicatos UGT y USOC opinan que la furgoneta todavía puede fabricarse en Barcelona. El pasado martes y ayer acudieron a Madrid para tratar de acercar posiciones con la dirección y lograr que el modelo pick up se produzca en la Zona Franca. "Sí estamos a tiempo. Sería muy injusto que no nos escucharan cuando la otra vez apenas nos dieron tiempo para reaccionar. Y si no lo estuviéramos, no nos habrían convocado con tanta urgencia", aseguró un representante de los trabajadores.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Fuentes del comité de empresa explicaron ayer que los dos sindicatos se reunirán hoy para acudir el viernes a Madrid con una propuesta conjunta. Las organizaciones ven complicado alcanzar un acuerdo sobre la congelación salarial y el rendimiento de la plantilla con las actuales peticiones de la dirección, pero opinan que será sencillo pactar que se alarguen los turnos o trabajar más sábados durante el año a cambio de la producción de 60.000 unidades anuales de la pick up en la Zona Franca.

Un portavoz de Industria matizó que no se trata de una negociación, pero que el ministerio sí quiere abordar y trasladar la posición de los sindicatos a la dirección. No en vano, la fábrica recibió 103 millones de euros procedentes del Plan de Competitividad de Automoción para un proyecto en la Zona Franca. El martes, Industria se reunió con cada sindicato, y ayer lo hizo con todos, incluida la dirección de Nissan.

La empresa también aseguró que no iba a pactar nada, sino que acudía a Madrid a explicar sus problemas de competitividad. CC OO no opina lo mismo. "Sí era una negociación, para ver cómo hacemos más competitiva esta planta con el plan industrial que ya tenemos y que la empresa incumple. El problema es que pasó a ser un chantaje", aseguraron fuentes del sindicato. Nissan negó haber incumplido el plan industrial.

Los representantes de CC OO afirmaron ayer que se levantaron de la mesa tras ver la propuesta que la empresa les propuso firmar. Esta, según CC OO, incluye la congelación salarial en 2012, una subida del 50% del IPC en 2013 y la inflación en 2014. En cambio, se reduce a la mitad la retribución de los nuevos quinquenios y bajan los complementos por incapacidad temporal. El documento también requería un aumento del 6% de la productividad, fijar la obligación de trabajar 15 sábados y una bolsa de 40 horas anuales, además de otras medidas que, según CC OO, suponen aumentar la jornada laboral en 112 horas al año.

El trasfondo electoral

La brecha sindical en Nissan se ha abierto de nuevo. La propuesta de la dirección de congelación salarial y medidas de flexibilidad ha puesto a prueba las costuras de la unidad sindical, formada por CC OO, UGT, CGT y USOC. En el trasfondo están las elecciones sindicales que celebrará el próximo mes de febrero Nissan en sus factorías de la Zona Franca y Montcada i Reixac.

El comité de Nissan de la Zona Franca está formado ahora por 10 miembros de CC OO, 6 de UGT y 4 de CGT. El de Montcada i Reixac cuenta con siete miembros de USOC, cinco de CC OO y uno de UGT. Los otros sindicatos acusan a CC OO de actuar con la vista puesta en los comicios de febrero, aunque esta organización lo niega.

CC OO considera que hay un tope que los trabajadores no pueden traspasar, puesto que consideran que la competitividad no debe buscarse por la vía salarial. Sin embargo, UGT prefiere hablar con la dirección, como ya hizo con Seat cuando estaba en juego el modelo de Audi Q3. Entonces, UGT consiguió que la plantilla accediera a la congelación salarial y logró el modelo. CC OO advierte de que ahora la empresa pide mucho más que congelar sueldos.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Lluís Pellicer
Es jefe de sección de Nacional de EL PAÍS. Antes fue jefe de Economía, corresponsal en Bruselas y redactor en Barcelona. Ha cubierto la crisis inmobiliaria de 2008, las reuniones del BCE y las cumbres del FMI. Licenciado en Periodismo por la Universitat Autònoma de Barcelona, ha cursado el programa de desarrollo directivo de IESE.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_