María tendrá un bebé en Ibiza, 'un pequeño saharaui' y el padre viene de Marruecos "invitado" al parto

María tendrá un hijo en Ibiza -su embarazo cumple el martes 4 de enero de 2011- y el padre de la criatura, Nabil, que vive en Fez y es de Marruecos, podrá asistir al nacimiento del bebé, al que llaman little saharawi (pequeño saharaui), gracias a una visa especial de "invitado" que la madre gestionó con mil recursos y papeleos. La pareja tramita desde junio su encuentro en España y futura boda. "Es un notición", reseñó ella.

Nabil está autorizado a estar un mes en España, viene con billete de vuelta, gracias a los trámites legales y la presión que hizo él y, especialmente su compañera, en muchas partes, ante la Policía, el Registro Civil en Ibiza y el Consulado de España en Rabat, donde in extremis, se atendió a los deseos de los novios ayer día 30. María solicitó una invitación para tres meses, para que Nabil ejerciera su paternidad y completar los procedimientos para la "licencia capacidad matrimonial."

"Espero que el bebé nazca genial y que en este mes nos den la licencia matrimonial definitiva, nos dé tiempo a legalizarla en todos los sitios y podamos volver los tres a Marruecos a casarnos", comunicó anoche María, que desveló su peripecia emocional y administrativa a elpais.com a lo largo de la última semana.

Es una relación "entre una ciudadana europea y un extranjero indocumentado" explica la abogada de María que reclamó no ser identificada. "Este uno entre muchos episodios, demasiado frecuentes, de lentitud exasperante, obstáculos y algo más duro -que el Defensor del Pueblo conoce- que se da en ciertas instancias de Ibiza". La respuesta a la carta de invitación contiene advertencias formales para no ser acusado "del delito de favorecer la inmigración ilegal."

Ahora el bebé "tiene que esperar a su padre, si o si", narró María en la recta final se su peripecia para la maternidad, tras la ruta de ambos por ventanillas de España y Marruecos, ante el Registro Civil, la Policía, bancos, abogados, el Consulado, más una lluvia de 'e-mails', llamadas de teléfono y por Skype.

María es de Guadalajara, vive desde hace seis años en Ibiza es profesora de español para extranjeros, políglota, artista de música y danza, técnica en prevención de drogodependencias. Nabil trabaja en el sector turístico en Fez, y también es políglota, comenzó estudios de Derecho, declara una nómina superior a los 500 euros y fondos suficientes en el banco para subsistir dos años.

La pareja decidió casarse en abril de 2010, tras haberse conocido e iniciado su relación el verano anterior, en un festival cultural. Ella organizaba escuelas de verano y daba clases de español en XefXaouen como voluntaria de una ONG Ensenyants Solidaris. En junio de 2010 se completó el expediente matrimonial.

"A él, en Rabat le entrevistaron el 22 de julio y a mí en Ibiza me notificaron que la cita era para el 8 de noviembre", concluye."Recurrí alegando que estaba embarazada de 23 semanas y que no nos daría tiempo a casarnos antes y me contestaron diciendo que por problemas de agenda no lo podían adelantar. Hice 'la famosa entrevista' ya gorda y embarazadísima de 31 semanas. Hasta el 23 de diciembre no me notificaron la aprobación de la capacidad matrimonial provisional." La urgencia demandó la invitación al padre.