Estado de alarma

La oposición exige soluciones para no apoyar más prórrogas de la alarma

Jáuregui afirma que "otro caos sería demoledor" para justificar el decreto

Madrid - 17 dic 2010 - 07:45CET

"Las mismas razones que llevaron al Gobierno a declarar el estado de alarma le llevan ahora a solicitar su prórroga tal y como prevé la Constitución. Algunas de las circunstancias que generaron la declaración de estado de alarma aún no han sido superadas. Persisten problemas que no han podido ser resueltos todavía y la recuperación de la normalidad de la navegación aérea ni es total ni está plenamente garantizada", aseguró el ministro de la Presidencia.

Ramón Jáuregui intervino para justificar así en el Pleno del Congreso la ampliación del estado de alarma hasta el día 15 de enero por el conflicto de los controladores. Logró el apoyo del PSOE, CiU, PNV y Coalición Canaria y tuvo enfrente el rechazo de ERC, IU, ICV, BNG, NaBai y UPyD. El PP confirmó su abstención con una intervención muy crítica de su portavoz, Soraya Sáenz de Santamaría.

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El ministro admitió que no ha habido avances en la búsqueda de una solución al conflicto con los controladores y hasta los tres partidos que respaldaron al Gobierno mantuvieron una posición crítica con la gestión de la crisis. Dieron por buena la necesidad de declarar el estado de alarma y ampliarlo ahora para evitar un nuevo caos en Navidad, pero incluyeron la exigencia al Ejecutivo para que busque soluciones permanentes y urgentes.

Así, Pere Macías (CiU) aseguró que su grupo es "crítico con cómo el Gobierno ha estado actuando en relación con este conflicto. Ya en este momento advertimos de que, una vez finalizada esta prórroga el 15 de enero, nuestro grupo no va a dar su apoyo, si es el caso, a ninguna otra prórroga ni a ninguna otra medida de carácter excepcional. Lo hacemos porque creemos que hay que resolver el conflicto de fondo y, una vez superadas estas fechas, vamos a ejercer con toda contundencia algo que hay que hacer, que es una profunda revisión de lo sucedido. Hemos tolerado lo intolerable durante muchos años, todos".

José Ramón Beloki (PNV) habló de "fracaso político en toda regla" y aseguró que "seis años de negociaciones no son seis años de negociaciones, son seis años de mirar más o menos para otro lado". Ana Oramas (CC) exigió al ministro de Fomento que empiece "ya el arbitraje para que el 15 de enero esté resuelto este conflicto, que es lo que exigen los ciudadanos".

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Jáuregui explicó que una repetición del caos aéreo en Navidades tendría "demoledoras y catastróficas" consecuencias y desarrolló el argumento de que los turoperadores internacionales están pendientes de que se garantice la tranquilidad en Navidad para contratar los viajes a España.

Rodríguez Zapatero, en primer término, junto a José Bono y Alfredo Pérez Rubalcaba en el Pleno del Congreso.ULY MARTÍN

Zapatero asistió mudo a todo el debate y a la votación

José Luis Rodríguez Zapatero excusó hace días su ausencia de la tribuna del Congreso para defender la prórroga del estado de alarma. La Moncloa dijo que el presidente debía viajar a Bruselas para asistir a la cumbre europea y, por eso sería sustituido por el ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui, en la defensa de la petición de prórroga.

Pero a las 12.30 se inició el Pleno extraordinario y Zapatero ya estaba en su escaño. Escuchó con atención todas las intervenciones y participó en la votación. A las 14.10 se levantó la sesión y el presidente se marchó del hemiciclo rumbo a Bruselas. También Mariano Rajoy había suspendido un viaje político a Bruselas para verse con la canciller Angela Merkel.

El pleno, sin precedentes en la historia democrática, tuvo además un estrambote durante la votación. El presidente del Congreso, José Bono, mandó cerrar las puertas para proceder a la votación sin esperar los minutos que se conceden a los diputados para llegar hasta el Hemiciclo, una vez que suenan las campanas en la megafonía de los edificios del Congreso. Unos veinte diputados, sobre todo del PP, se quedaron fuera. Cuando aporrearon las puertas para entrar, Bono les reconvino irritado y siguió con la votación. La bronca continuó en el pasillo con gritos como los de la popular Teófila Martínez: "Se han acostumbrado a sacar los tanques".