Un foro local por la paz

La Casa de la Paz de Aiete transformó ayer sus salas y las convirtió en un ágora en el que 13 representantes, mandatarios y ex alcaldes de ciudades de todo el mundo intercambiaron sus opiniones y experiencias alrededor de café y té bajo el lema común La convivencia en las ciudades.

El alcalde de San Sebastián, Odón Elorza, indicó que el objetivo de la cita, que continúa hoy y se enmarca dentro de la candidatura donostiarra a capital cultural europea en 2016, es tratar de "aprender buenas políticas, experiencias y prácticas".

Todo ello desde intervenciones que analizan problemáticas como la de la integración de la inmigración en Cataluña o en el sur de Francia, la violencia de las FARC en Colombia, la solución de conflictos en Irlanda del Norte, las heridas de la guerra de los Balcanes, el enfrentamiento entre saharauis y marroquíes o el terrorismo de ETA. "Es un encuentro de trabajo, no espectáculo", enfatizó Elorza.

13 representantes de distintas ciudades del mundo participan en la cita

"El compromiso facilita sanar las heridas", asegura un político irlandés

En Salt (Girona), la inmigración ha pasado en una década de un 6% a un 43%. Su alcaldesa, la socialista Iolanda Pineda, asegura que resulta inevitable que surjan problemas, pero que tratan de fomentar la integración con planes de acogida. Igualmente, destaca que estas reuniones, de temáticas tan variadas, demuestran la "valentía de alcaldes que intentan buscar soluciones donde a veces parece que no las hay".

Donde sí la hubo fue en Irlanda del Norte, que hasta hace cinco años vivía atenazada por la violencia del IRA. John Mathews, ex presidente de la Alianza de Irlanda del Norte y presidente de una asociación de gobiernos locales, considera que los problemas se deben resolver con gente "imaginativa e innovadora" y que el foro que se celebra en la Casa de la Paz resulta útil porque se necesita cooperación "a todos los niveles".

Elorza ha destacado en más de una ocasión que pretende que el centro de derechos humanos de Aiete se convierta en un espacio en que cerrar heridas, una tarea "difícil", según Mathews, pero posible si se miran las cosas con sentido del humor. "Con el compromiso de la gente es más sencillo sanar las heridas", apunta.

La ex senadora colombiana Gloria Cuartas dirige actualmente Colombianos y Colombianas por la Paz, un movimiento que trata de que "se vuelva a nombrar el derecho a la paz". Cuartas afirma que la palabra "paz" y la búsqueda de una solución política al conflicto con las FARC "se quiere borrar del inconsciente colectivo".

Esta representante colombiana sostiene que "cuando se vive un dolor en medio de un conflicto, a veces sólo escuchas a parte de las víctimas". Por ello, considera necesario hacer "un proceso de reparación muy duro con la historia". Algo que facilitará, opina, la Casa de la Paz, "un lugar que permitirá nombrar el dolor".