Anticlímax en Ámsterdam

El Madrid aterrizó en Holanda y su entrenador, José Mourinho, se trasladó a una sala del Ámsterdam Arena para hablar en público por primera vez desde que fue sancionado por insultar a un árbitro y se desató su polémica con el entrenador del Sporting, Manuel Preciado. "He pasado los mejores 15 días desde que estoy en el Madrid", dijo con esa mezcla de ironía y sinceridad brutal que le caracteriza; "tranquilo, trabajando con los jugadores, sin tener que dar conferencias".

Mourinho, que goza en la tensión y el cambio, debió de disfrutar de su estado de reclusión tanto como del barullo que se armó a su alrededor la semana pasada. En Ámsterdam su misión será más compleja de lo que parece. La proximidad del clásico contra el Barcelona en el Camp Nou hace que el clima en la expedición madridista sea de anticlímax. En Holanda apenas hay ruido y los jugadores corren el riesgo de sentirse fuera de sitio. El equipo fue recibido en Schiphol por un grupito que no pasaba de 20 curiosos, gente comedida, casi indiferente, que ni jaleó al paso de las estrellas. En esta situación de armonía, extraña en los últimos tiempos, Mourinho deberá estimular a un equipo poblado de jugadores que no son titulares habituales para lograr un resultado que asegure el liderato en el grupo. Al Madrid le basta con un empate ante el Ajax o incluso con una derrota siempre que el Milan pierda también en su visita al Auxerre. La falta de objetivos claros y un rival que se juega su permanencia en las competiciones europeas suponen dificultades añadidas. El Ajax tiene mucho que perder, se agranda en su campo y cuenta con el uruguayo Luis Suárez, su goleador, sancionado en la ida.

Mou: "Nos podemos permitir varios cambios con Albiol, Granero, Arbeloa o Benzema"

"Queremos ganar el partido", dijo Mourinho como si creyese en la necesidad de explicar lo obvio; "y, si no lo podemos ganar, no lo queremos perder. Queremos terminar con la historia de la primera plaza. El equipo que jugará será digno y fuerte para dar continuidad a lo que el Madrid viene haciendo".

El técnico anunció cambios en la alineación, algunos forzados por las bajas y otros inspirados por su voluntad de dar descanso a algunos futbolistas después de la semana de selecciones nacionales. "Como entrenador, encuentro más dificultad en el trabajo que he hecho en estos días con el partido de España, el del Athletic y el del Ajax que con la preparación del encuentro contra el Barça", dijo. "En Ámsterdam se cierra el ciclo de tres partidos en seis días con viajes, métodos diferentes de entrenar... Esto es más problemático que jugar en el Camp Nou el lunes. La acumulación de cansancio no presentará para entonces los problemas que presenta ahora. Contra el Ajax haremos cambios obligatorios, como el de Khedira y el de Higuaín, que tienen problemas físicos. He repetido que no quiero hacer muchas rotaciones. Pero me parece que el equipo ha conseguido una estabilidad en su juego y nos podemos permitir hacer tres o cuatro cambios con gente de la calidad de Albiol, Granero, Arbeloa o Benzema... No será un problema para el equipo, que estará en condiciones de dar buena impresión".

Mourinho ha repetido en el vestuario que es importante quedar los primeros para evitar al Chelsea, el Manchester United, el Inter o el Bayern en los octavos de final. Xabi Alonso lo subrayó: "Tal y como van los grupos, parece que los equipos más fuertes acabarán en la primera posición. Siendo primeros, nos evitaremos luego los cruces difíciles. El factor campo también te puede ayudar".