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El líder del PSC de Cunit apoya al imán culpable de coaccionar a una mediadora

El dirigente socialista opina que la víctima, empleada municipal, "miente"

El silencio del PSC de Cunit (Baix Penedès) sobre el imán condenado por dirigir una campaña de coacciones graves contra una empleada municipal se rompe en Internet. El primer secretario local de los socialistas, José Luis Rodríguez Fernández, está adherido en Facebook al "grupo de apoyo y solidaridad" a la familia del imán. Este apoyo se mantiene después de que el religioso y su hija hayan sido condenados por movilizar al colectivo musulmán contra la mediadora Fatima Ghailan para que esta dejara su empleo, según la sentencia judicial. Ghailan, musulmana, no se cubre la cabeza, conduce y se relaciona con españoles, por ello la sometieron los condenados a coacciones.

Rodríguez, cuyo partido gobierna en Cunit, no se limita a pedir solidaridad: en abril, cuando se conoció la fecha del juicio, intervino en el foro virtual para dar moral a los entonces imputados. "Espero que los jueces tengan suficiente lucidez para darse cuenta de quién miente en este asunto", escribió en alusión al relato de Ghailan, la víctima del acoso.

La respuesta de la hija del imán llegó en menos de dos horas: "Gracias, José Luis. Un abrazo muy fuerte de mi parte y de parte de mis padres". Fuentes municipales señalaron ayer que esta actitud es "incompatible" con el cargo de Rodríguez. Miembros del PSC de Cunit que piden anonimato lamentaron que "la estrecha relación" de dirigentes socialistas con los condenados contaminara el caso. "Siguen asegurando que la víctima miente", señalan. El Ayuntamiento prevé mantener a los condenados como únicos interlocutores del colectivo musulmán en Cunit.

Rodríguez aseguró ayer a este diario que formuló su apoyo de forma privada. "Facebook es de uso personal y ellos son amigos personales míos", dijo sobre el imán condenado. "Se está manipulando todo", añadió antes de colgar el teléfono con cierta brusquedad. El dirigente no volvió a contestar las llamadas de este diario y no se explicó sobre la supuesta imparcialidad de su cargo en un asunto que le afecta personalmente. Su esposa, Maria Júlia Masias, testificó en el juicio citada por la defensa del imán. Masias dijo que los condenados cenaron en el domicilio del líder socialista la noche en que amenazaron de muerte a Ghailan y a su familia.

CiU e ICV exigen a la alcaldesa que rectifique

La oposición de Cunit en bloque presentará una moción para forzar al Ayuntamiento a rechazar a los líderes religiosos condenados como únicos interlocutores del colectivo musulmán del municipio. "Estos señores ya no tienen validez como interlocutores", explica Montserrat Carreras, portavoz de CiU, principal grupo en la oposición.

La moción se presentará en el pleno del 25 de noviembre y la oposición exige, además, la reprobación de la actitud del Ayuntamiento durante este caso de acoso. "El Consistorio se negó a defender a la empleada municipal musulmana y se puso de lado de los agresores. Exigimos una rectificación", señaló Iván Faccia, de ICV.

La alcaldesa y senadora por Tarragona, la socialista Judit Alberich, mantiene que los líderes islámicos han sido condenados por un conflicto privado entre dos partes, lo que no les desacredita para seguir siendo el único punto de enlace entre la comunidad musulmana y el Consistorio. La sentencia, sin embargo, precisa que los condenados involucraron al grueso de la comunidad musulmana en una campaña contra la mediadora cultural para que esta abandonara su empleo. Mantenerles como interlocutores significaría tolerar esas coacciones y que siguieran intimidando a la empleada, lamenta la oposición. "Es lo mínimo que podemos hacer", subraya Carreras.

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