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Sarkozy restablece por la fuerza el suministro de gasolina

El Senado francés aprueba la reforma de las pensiones

Antonio Jiménez Barca

El presidente Nicolas Sarkozy no dudó ayer en usar la fuerza para restablecer el suministro de combustible en París. Mandó a un delegado al frente de un batallón de robustos policías antidisturbios y a bastonazos desalojaron a los huelguistas que bloqueaban la salida de la refinería de Grandpuits, a 70 kilómetros de la capital, desde hace dos semanas. Horas después, el Senado aprobó la reforma de las pensiones, origen de las protestas.

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Sobre la firma

Antonio Jiménez Barca
Es reportero de EL PAÍS y escritor. Fue corresponsal en París, Lisboa y São Paulo. También subdirector de Fin de semana. Ha escrito dos novelas, 'Deudas pendientes' (Premio Novela Negra de Gijón), y 'La botella del náufrago', y un libro de no ficción ('Así fue la dictadura'), firmado junto a su compañero y amigo Pablo Ordaz.

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